MURCIA. La exposición Mursiya. Fantasía de unos baños recuperados, del artista murciano Juanjo Molina Gallardo, ha inaugurado las actividades con las que la galería Babel de Murcia quiere rendir homenaje a los 12 siglos de historia de la ciudad. Lo hará a través de "la marca registrada MURCIA2025", con 12 muestras individuales con las que se suma a las celebraciones que se desarrollarán en la capital de Segura durante todo el año. Cada siglo será abordado por un artista que evocará con sus obras lo más significativo de esa época para la ciudad y la comarca de Murcia.
Entre estos temas será frecuente abordar las pérdidas arquitectónicas e históricas que han acontecido. Es el caso de esta primera exposición, que se podrá visitar hasta el 8 de febrero de 2025 y que viaja directamente al pasado musulmán de la ciudad a través de las pinturas de unos baños árabes que muestran la huella del tiempo. Y ojalá fuera así, porque la realidad es que esos baños desaparecieron; bien víctimas del abandono como de un urbanismo que valoró más que Murcia 'pareciera' una capital del siglo XX que conservar este rico patrimonio.
Señala al respecto el director de la galería, Javier Cerezo, que "a pesar de los siglos en los que Murcia y sus gentes formaron parte de la cultura andalusí, del siglo VIII al XIII, hasta hace muy poco hemos considerado mayoritariamente nuestro pasado islámico apenas como un tiempo anecdótico plagado de despropósitos y retrasos históricos. Simplemente utilizar la palabra Reconquista para referirnos al tiempo y a los hechos transcurridos entre los años 711 y 1492 denota una actitud de negación y manipulación de estos siglos de Historia de nuestro país".
Javier Cerezo explica que "esta exposición está motivada por la historia y las circunstancias de la desaparición en 1953 de los Baños árabes de la calle Madre de Dios de Murcia, siendo este año de celebración del 1200 aniversario de la fundación de la ciudad de Murcia una buena ocasión para recordar que una de las pérdidas más lamentables que una colectividad puede sufrir es la de su memoria".
Recuerda, asimismo, que "fue la aparición en 2009 del barrio andalusí en las inmediaciones del Palacio de San Esteban, cuando se construía un aparcamiento subterráneo, y la posterior movilización ciudadana lo que, de nuevo, llevó a los murcianos a recordar la destrucción de los baños árabes para construir la Gran Vía, a pesar de que las instituciones españolas que reclamaban su conservación".
El director de Babel añade que para Juanjo Molina, licenciado en Bellas Artes por la universidad de Valencia, "los temas de arquitectura andalusí han formado parte de su equipaje como artista desde muy joven y sus obras se han expuesto en Murcia, Madrid, Londres, Roma, México, Valencia, Granada, Almería, Cádiz y Jaén, entre otros lugares". Así, Juanjo Molina recrea con sus pinturas estos baños perdidos, estancias abovedadas flanqueadas por arcos de herradura "haciendo una firme reivindicación de nuestra memoria".
El artista, que compagina la creación pictórica con la enseñanza, considera que "el oficio se aprende estudiando a los grandes maestros, tanto antiguos como contemporáneos, y pintando, pintando mucho. La economía en la pincelada es uno de los rasgos que delatan el dominio de la pintura. Me maravilla contemplar esas obras donde ves un rostro, una mano o una rosa y cuando te acercas sólo puedes ver cuatro brochazos densos y matéricos, un prodigio de simplicidad en la ejecución".
Asimismo, dice sobre su trabajo que "siempre trabajo series de un mismo tema para poder experimentar y sacar lo mejor de mí mismo a través de un trabajo metódico y paciente, a veces una serie puede durar un año o varios, depende del tema y de la complejidad de las obras".