Alcaraz sufre y remonta para ganar a Draper y pasa a segunda ronda en Basilea, la ciudad de Federer

MURCIA. Un triunfo del número 1 del tenis mundial un mes y una semana después. Carlos Alcaraz Garfia se ha impuesto al inglés Jack Draper por 3-6, 6-2 y 7-5 en 2 horas y 16 minutos para sellar su pase a la segunda ronda del ATP 500 de Basilea, la ciudad suiza de la que es Roger Federer, uno de los grandes ídolos del murciano, quien se enfrentará en su siguiente encuentro al ganador del duelo entre el neerlandés Botic van de Zandschulp y el francés Adrian Mannarino.

Era el primer enfrentamiento entre estos dos jóvenes jugadores, el de Palmar de 19 años y el de Sutton de 20, y se lo llevó el que partía como favorito.

Sin embargo, Draper, número 45 del mundo -el tope en su todavía corta carrera- no iba a ser un rival ni mucho menos sencillo para un Alcaraz que llevaba sin jugar desde hace tres semanas, en concreto desde el 4 de octubre cuando perdió en primera ronda del ATP 500 de Astaná, en Kazajistán, frente al belga David Goffin por 5-7 y 3-6 y cuya última victoria la había logrado en la Copa Davis.

En este periodo sin competir el murciano ha tenido tiempo de hacer un reset en su exigente temporada y él mismo había anunciado que estaba ansioso por reaparecer. Sin embargo, la vuelta a las pistas le resultó dura en el primer set.

El español comenzó anotándose su primer saque con apuros y en los tres siguientes juegos vio como su rival ponía la directa para mandar por 1-3 ya con un break a su favor.

Carlos se agarró a la pista ante un Draper que sacó a un altísimo nivel -el zurdo buscó las líneas sirviendo a 217 kilómetros por hora- y así apretó con el 2-3 y con el 3-4 y tuvo dos bolas para el 4-4 al resto pero no las aprovechó y eso lo pagó en una manga inicial que se llevó el británico con su segunda ruptura en el encuentro y esta en blanco.

En 42 minutos y con un 3-6 a Alcaraz se le ponía muy cuesta arriba el encuentro frente a un adversario crecido y normalmente dominando con sus potentes golpes en la pista rápida del estadio St Jakobshalle.

El palmareño, que no estaba tomando las mejores decisiones en puntos clave, necesitaba dar un giro de timón y lo dio pues comenzó haciendo lo que no había logrado hasta entonces: abrió el segundo set con su primer break para luego conservar su saque con solvencia y así colocarse 2-0.

Una nueva ruptura, la segunda consecutiva, le posibilitó seguir abriendo brecha y con el 3-0 se sentó para tomarse un plátano. Le dio dos mordiscos y volvió corriendo a su sitio para servir y seguir con su buena dinámica. El cuarto juego seguido, ya con golpes de auténtico número 1, evidenciaba que el partido era otro bien distinto al de un rato antes.

Draper por fin pudo salvar su saque para establecer primero el 4-1 y luego el 5-2 pero Alcaraz no estaba dispuesto a dejarse sorprender e, igualmente echando la bola al aire, cerró el set con una dejada tras otros 34 minutos, con lo que el pase a la segunda ronda se jugaría en el desempate.

Tras ausentarse y volver unos minutos después, apurando al máximo el tiempo permitido para ello, Draper regresó con fuerza y ganó su servicio en blanco.

Alcaraz, remontando un 15-30, lo igualó, pero el inglés continuó firme para mantener la iniciativa (1-2). Tocaba seguir apretando y es lo que hizo Carlitos, que llevó al marcador otro empate con un juego en blanco.

El pupilo de Juan Carlos Ferrero entendió que era el momento de ir por el triunfo y, sacando su derecha a pasear, se anotó el break que supuso el 3-2 también ayudado por una doble falta de su contrincante.

Pero no estaba ni mucho menos hecho y Draper resistió para, con un break mucho tiempo después, empatar a 4 y luego recuperar el mando con el 4-5.

El murciano se veía contra las cuerdas pues sacaba para evitar la derrota y, siendo agresivo, que es como mejor se encuentra con una raqueta en la mano, no cesó en su empeño y superó ese momento apuro y luego le rompió el saque a Draper rematando el break con un gran revés a dos manos (6-5). "¡Viva Murcia¡", gritaron desde la grada y, tras ese ánimo que tan dentro le llega a Carlos, éste no falló.

Aunque desperdició dos bolas de partido a la tercera fue la ganadora y se clasificó tras otra hora de dura batalla en un choque en el que sumó 89 puntos, sólo dos más que su oponente.

Alcaraz tratará continuar su camino el miércoles frente al que resulte vencedor del choque de este martes entre Van de Zandschulp, de 27 años y número 35 del mundo, y Mannarino, veterano de 34 y 42 del ranking.