Alcaraz pasa por encima de Van de Zandschulp en su estreno en un Grand Slam

MURCIA.  El murciano Carlos Alcaraz Garfia, con la naturalidad de quien va a la oficina a trabajar pero con la ilusión de ir a hacerlo por primera vez, ha debutado en un cuadro final de un torneo de Grand Slam, el del Abierto de Australia 2021, con un rotundo triunfo por 3-0 ante el neerlandés Botic Van de Zandschulp, al que ha superado de principio a fin para cerrar el choque con parciales de 6-1, 6-4 y 6-4 en apenas 1 hora y 54 minutos.

Era el primer encuentro al mejor de cinco sets en la carrera de este joven jugador de 17 años, 9 meses y 4 días, pero en tres solventó la papeleta el número 141 del ranking ATP frente a un rival de 25 años y que aparece 10 puestos por detrás en esa clasificación.

El español, que se plantó en este torneo después de haber conseguido su billete en la previa celebrada en Doha, donde ganó al eslovaco Filip Horansky, al ruso Evgeny Karlovskiy y al boliviano Hugo Dellien Velasco, no se mostró nervioso y si lo estaba lo disimuló muy bien sobre la pista rápida del Melbourne Park.

De hecho, el primer set se lo llevó en apenas 22 minutos y cediendo sólo un juego. El 6-1 con el que pasó por encima de Van de Zandschulp no dejó lugar a dudas de sus intenciones de ir a por el triunfo desde el arranque del choque.

Los cinco primeros juegos fueron ganados por el pupilo de Juan Carlos Ferrero, dos de ellos en blanco. Su rival sólo pudo respirar en el sexto pero el en el séptimo Alcaraz, con un solo punto cedido, llevó el 1-0 al marcador de sets dando la sensación de una solidez impropia de un chico de su edad debutando en un "major".

El segundo parcial fue ya algo más igualado, como cabía esperar, aunque Alcaraz lo comenzó rompiendo el saque de su oponente por tercera vez en el partido. "La Roca" llevó la iniciativa ganando su servicio hasta el 1-3, pero dos juegos seguidos del de Wageningen lo igualaron a 3. Lejos de verse afectado, Alcaraz reaccionó volviendo a hacer un "break" que resultó clave, pues recuperó el control y terminó con el set en 55 minutos con un 6-4.

El tenista nacido en El Palmar veía cerca su objetivo de acceder a la segunda ronda en Melborune, una ciudad en la que lleva tres semanas, dos de ellas encerradas en su habitación de hotel por el confinamiento obligado al que se vio sometido por el positivo por coronavirus de un compañero de viaje en avión desde Doha y eso a pesar de dar él siempre negativo. Ese periodo sin pisar la pista no parece haberle sentado tan mal.

En el tercer y definitivo set del partido tuvo un guión distinto, pues fue Van de Zandschulp el que mandó haciendo bueno su saque (0-1, 1-2, 2-3 y 3-4), pero en el noveno juego de este parcial, con igualad a 4, Alcaraz, quien acabó ganando 99 puntos por los 75 de su rival, se impuso como lo hacen los grandes: siendo resolutivo en el momento de la verdad. Una nueva ruptura, la quinta en la mañana australiana -madrugada española- le puso a un juego de la victoria y, ya lanzando la bola al aire, no dejó pasar la oportunidad para, con un nuevo 6-4 éste en 37 minutos, ampliar su estancia en el primer Grand Slam de la temporada, el primero en la incipiente trayectoria de este talento que ha vivido su bautismo en la élite de manera inmejorable y logrando lo que se le resistió, por ejemplo, a Roger Federer y a Novak Djkovic, y esto es resultar victorioso en su estreno en un Grand Slam, algo que hizo con un tenis fluido y por momentos brillante.

Ahora le espera el ganador del duelo entre el polaco Hubert Hurkacz, jugador de 23 años y número 30 del mundo, y el sueco Mikael Ymer, de 22 años y 95 en la ATP.