MURCIA. La estresante vida del tenista. Carlos Alcaraz Garfia debió esperar casi dos horas y media para que comenzara su partido de la primera ronda del ATP Master 1.000 de Cincinnati ante el italiano Lorenzo Sonego y en apenas 18 minutos vio como la lluvia lo interrumpía.
El joven jugador murciano, de 18 años y que esta semana ocupa el puesto 55 del mundo, pasó el día aguardando el momento de saltar a la pista del Linder Family Tennis Center de Ohio en una jornada marcada por las miradas al cielo y cuando por fin tuvo la ocasión de medirse a Sonego, de 26 años y número 27 de la clasificación ATP, vio como el choque se detenía por el agua que volvió a caer con fuerza.
Apenas había transcurrido un cuarto de hora de encuentro y el de El Palmar mandaba por 2-1 y saque pues, aunque comenzó viendo como su rival se anotaba su servicio, lo igualó de inmediato y más tarde, restando, cobró esa ventaja con la que se reanudará el choque de un torneo de mucho prestigio y en el que Alcaraz comparece después de haber superado la fase previa, en la que se impuso primero al brasileño Thiago Monteiro y a continuación al bielorruso Ilya Ivashka.