Fotos: RÍO OPEN
MURCIA. La mejor versión desde su vuelta tras las lesiones. Carlos Alcaraz Garfia, quien en sus dos primeros partidos en Río de Janeiro demostró que sabe ganar cuando no parece tener el día, elevó el nivel de su tenis para ganar con más brillantez al serbio Dusan Lajovic por 6-4 y 7-6 (0) en 1 hora y 53 minutos y ya está en las semifinales de este ATP 500 que se celebra en Brasil, en las que se medirá al ganador del duelo entre el argentino Sebastián Baez y el chileno Nicolás Jarry.
El joven tenista murciano, de 19 años y número 2 del mundo, se medía a un rival de 32 y que ocupa la ocupa la posición 80. En el tercer encuentro entre estos jugadores el propósito de Carlos era ampliar su racha y el del jugador de Belgrado ganarle por primera vez. Se cruzaron hace apenas una semana en los cuartos de final del ATP 250 de Río de Janeiro -se lo llevó el español por 6-4 y 6-2- y antes, en la segunda ronda del Abierto de Australia de 2022 con otro triunfo por 6-2, 6-1 y 7-5.
Esos precedentes no amilanaron en absoluto al veterano jugador balcánico, al menos de salida. El partido comenzó con cada tenista ganando más o menos con solvencia su saque y Alcaraz llevando la iniciativa al ser el primer en servir.
En el quinto juego llegaron las dificultades para el de El Palmar, que cedió su saque como consecuencia de una serie de errores que Lajovic castigó hasta el punto de situarse por delante por primera vez en el encuentro y acto seguido, ya con su saque, consolidó lo andado (2-4).
Era el momento de reaccionar y el pupilo de Juan Carlos Ferrero, buscando puntos ganadores, lo hizo. Aseguró su saque con firmeza y luego le arrebató el suyo a Lajovic encontrando sus mejores sensaciones desde que llegó a Río.
Así, viendo una sonrisa en su cara -sin duda la mejor señal posible-, Carlitos se encaminó hacia el triunfo en la primera manga y lo hizo enlazando cuatro juegos seguidos hasta el 6-4 en 42 minutos.
Sobre la tierra batida del Jockey Club Brasileiro el palmareño, quien tuvo tiempo de sacar de la pista una polilla cuidadosamente con su raqueta -no se buscó problemas con los animalistas-, comenzó bien y con solidez a la hora de echar la bola al aire. Así se colocó 1-0 y 2-1, pero su rival, atacando con determinación, opuso seria resistencia y hasta volteó el marcador con su segundo break en el encuentro y luego amarrando su servicio.
El 2-4, como en el primer set, dejaba a Carlos en una situación comprometida pero la pista Guga Kuerten, la central del recinto, asistió de nuevo a la extraordinaria respuesta de Alcaraz. Sus dejadas -nadie las hace como él- levantaron al público de sus asientos y le acercaron a la victoria (5-4).
No obstante, Lajovic, quien estaba realizando también un gran partido, siguió apretando y alargó el encuentro con la igualada a 5 y luego anotándose un break para el 5-6.
El de Belgrado servía para forzar la tercera manga y lo tuvo, pero Carlos levantó una bola de set y, sabiendo sufrir, forzó el tie break.
Un partido con alternativas y con grandes puntos por parte de ambos jugadores merecía un final así. En la muerte súbita el murciano se mostró implacable. En un abrir y cerrar de ojos se apuntó un 7-0 que le dio el pase a la final tras 1 hora y 11 minutos más de un partido muy intenso y en el que logró 80 puntos por los 65 de su rival.
Tras haberse deshecho sucesivamente del brasileño Mateus Alves por un doble 6-4, del italiano Fabio Fognini remontando con un 6-7 (5), 6-2 y 6-4 y de Lajovic el siguiente rival del palmareño, ya en la pelea por acceder a la final, será el ganador del duelo entre el argentino Sebastián Baez, de 22 años y número 35 del mundo; y el chileno Nicolás Jarry, de 27 y que ocupa el puesto 139.
En la otra parte del cuadro ya están definida la semifinal entre el español Bernabé Zapata y el británico Cameron Norrie.