MADRID. La petrolera española obtuvo ganancias en el primer trimestre del año de 648 millones de euros y no se descarta que en el cómputo del año pueda alcanzar beneficios de 1.550-1.600 millones de euros (recordemos que venía de fuertes pérdidas el pasado año que superaron los 3.200 millones).
La recuperación de las economías, la reapertura de los países y en definitiva la vuelta a la normalidad implica un incremento de la demanda de petróleo y con ello el precio del crudo mantendrá la tónica alcista, redundando a favor de Repsol.
También a destacar la rentabilidad de su dividendo que se espera que incluso supere el 5%. Si todo transcurre con normalidad', su potencial tendría un primer objetivo en los 13 euros.
Ismael De la Cruz es analista senior de Investing.com