MADRID. El implacable repunte de las acciones de Microsoft no muestra signos de tocar techo. La compañía hizo historia la semana pasada cuando se convirtió en la segunda compañía pública estadounidense después de Apple en alcanzar una capitalización de mercado de 2 billones de dólares. La compañía con sede en Redmond, Washington, alcanzó este hito y el precio de sus acciones continúa subiendo, registrando máximos históricos una vez más antes de ayer, cerrando en 271,40 dólares.
Incluso tras subidas de esta magnitud, que han impulsado las acciones un 20% en lo que va del año y un 40% durante 2020, los analistas creen que habrá aún más subida. Microsoft, que ha superado tanto a Apple como a Amazon este año, está floreciendo bajo el mando del director ejecutivo, Satya Nadella, que ha transformado a la compañía en el mayor vendedor de software de computación en la nube.
Lo que está atrayendo a los inversores es la creencia de que Microsoft tiene más potencial de crecimiento a largo plazo, a medida que se expande a áreas como el aprendizaje automático y la computación en la nube. El analista de Morgan Stanley, Keith Weiss, al tiempo que reitera una calificación de compra para las acciones de Microsoft con un precio objetivo de 300 dólares, dijo en una nota reciente que el mercado está subestimando a la compañía. "Si bien los bajistas temen la presión sobre el múltiplo a medida que el crecimiento del BPA se desacelera, diríamos que el múltiplo actual no refleja adecuadamente el crecimiento del BPA a futuro". Más del 90% de los analistas de Wall Street recomiendan comprar Microsoft, mientras que ninguno asigna el equivalente a una calificación de venta a las acciones. El precio objetivo promedio apunta a un alza de alrededor del 11% desde los niveles actuales.
El negocio de computación en la nube de Microsoft ha sido el principal factor tras la subida del 426% de las acciones en los últimos cinco años, un período en el que Nadella también se diversificó en nuevas áreas de crecimiento. Durante su mandato, gastó más de 45.000 millones en la adquisición de empresas, incluida la red social laboral LinkedIn, los desarrolladores de videojuegos Mojang y Zenimax, y el servicio de almacenamiento de código GitHub.
Estas apuestas han dado sus frutos en gran medida. El negocio de Intelligent Cloud de Microsoft representó el 33,8% de los ingresos de la compañía en 2020, lo que la convierte en el mayor de los principales segmentos de negocio del gigante del software e infraestructura por primera vez, un aumento del 31% con respecto a 2019. La división mostró un crecimiento de los ingresos del 24% el año pasado, frente al crecimiento del 13% en productividad y procesos empresariales, y al crecimiento del 6% de la unidad de computación más personal de Microsoft.
Y la pandemia ha acelerado aún más el crecimiento de Microsoft. Millones de trabajadores y estudiantes atrapados en casa durante el confinamiento usaron el software de reuniones de la compañía, Teams, para mantenerse en contacto y conectados. Además, los grandes clientes corporativos aceleraron su cambio hacia la computación en la nube, mientras que los clientes más jóvenes compraban suscripciones a juegos de Xbox. "Tras más de un año desde el estallido de la pandemia, las curvas de adopción digital no se están desacelerando. Se están acelerando", dijo Nadella en un comunicado en abril.
A medida que continúa el impresionante repunte de Microsoft, las acciones aún no han llegado a un punto en el que se consideren caras. La compañía está expandiendo su cuota de mercado a nuevas áreas de la economía digital, como la computación en la nube y la IA, mientras mantiene su posición de liderazgo con productos de software heredados como Windows y Office. Esta ventaja duradera ayudará a la compañía a lograr un crecimiento sostenido de dos cifras en ingresos, beneficio por acción y flujo de caja libre, lo que convierte sus acciones en una opción tecnológica fiable a largo plazo.
Haris Anwar es analista senior de Investing.com