Es poco probable que el tráfico aéreo se recupere a los niveles anteriores a la era covid-19 antes de 2024, según el analista
MADRID. Los gobiernos europeos han logrado estabilizar con éxito el sector de las aerolíneas de la región con diversas medidas: desde inyecciones de capital y garantías de préstamo hasta planes de permisos para el personal de las líneas aéreas, pero sólo a corto plazo.
El futuro desapalancamiento y la reestructuración operativa -incluyendo la reducción de las operaciones- serán medidas necesarias, pero resultarán un reto. El sector tiene un historial deficiente de generación de flujo de efectivo, incluso en épocas de bonanza, dados los antecedentes de exceso de capacidad del sector. Esto es antes de que consideremos la posibilidad de que se produzcan sucesivas oleadas de nuevas infecciones de Covid-19 en Europa y entre los principales socios comerciales de la región en los próximos trimestres.
La visibilidad sobre la recuperación del tráfico sigue siendo baja. Los clientes del tráfico de larga y corta distancia siguen reservando con muy poca antelación. Los viajes de negocios se están recuperando sólo lentamente. El transporte aéreo de mercancías es un sector que ha funcionado relativamente bien, pero el aumento gradual del tráfico de viajeros reducirá la capacidad de carga disponible en los aviones de pasajeros. Ese aumento comprimirá los rendimientos de la carga.
El negocio del transporte aéreo de mercancías también es demasiado pequeño para compensar la disminución de los ingresos procedentes de los viajes de pasajeros. Es poco probable que el tráfico aéreo se recupere a los niveles anteriores a la era covid-19 antes de 2024 y, en consecuencia, la industria tendrá que reducir su capacidad.
Werner Stäblein es analista de Scope