Los gobiernos regionales recibirán fondos para la plena integración de los inmigrantes en el estilo de vida europeo
BRUSELAS. La Unión Europea centrará en los gobiernos regionales la inversión de fondos para la integración de los inmigrantes en nuestro estilo de vida. Las nuevas políticas de inclusión para los próximos años irán dirigidas a mejoras la forma de vida de los 34 millones de hurones de origen extranjero en aspectos tan importantes como la educación, el trabajo, la salud y la vivienda. Ésta es la esencia del Plan de Acción presentado por el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, y la comisaria de Interior, Ylva Johansson, y que forma parte el nuevo Pacto de Inmigración y Asilo, pendiente de aprobar por los Estados miembros.
El plan de acción para 2021-2027 "se basa en el principio de que la integración inclusiva requiere esfuerzos tanto de la persona como de la comunidad de acogida. Por ello, la Unión Europea centrará sus esfuerzos de inversión con fondos destinados a los gobiernos regionales y locales, “que son las comunidades más cercanas al inmigrante, su pueblo, su barrio”, explicó el vicepresidente Margaritis Schinas. Y añadió que “cada año entran dos o tres millones de extranjeros y se marchan la mitad. Son un colectivo de 34 millones que han nacido fuera que crece. Y nosotros somos una población que envejece, los necesitamos”.
Schinas, que ha comparecido en rueda de prensa tras una larga convalecencia por covid-19, ha recordado lo que le costó explicar el nombre de su vicepresidencia: promoviendo el estilo de vida europeo. Y lo puso como referencia de los que será la inclusión. “Todos los que tienen derecho a estar en Europa deberían tener acceso a las herramientas que necesitan para desarrollar todo su potencial y asumir los derechos y obligaciones que rigen nuestra Unión”, explicó. Ylva Johansson también insistió en “brindar las mismas herramientas y el apoyo necesarios para contribuir a la sociedad, de modo que los migrantes puedan alcanzar su máximo potencial y nuestras sociedades se beneficien de sus fortalezas y habilidades”.
El vicepresidente resumió en pocas palabras el Plan de Acción. “No es tan complicado: tener un empleo para poder enviar a sus hijos a la escuela, dónde vivir y salud”. Respecto a las diferencias culturas o religiosas de este sector de la población, Schinas manifestó que “la religión no es un problema, la libertad de culto es parte de nuestros valores comunes, del estilo europeo de vida, como lo es no pertenecer a ningún culto”. Y tras ello, insistió en la importancia de formar a las mujeres inmigrantes, para que fueran independientes económicamente y no tuvieran que sufrir ningún tipo de discriminación entre sus comunidades.
Los recientes atentados islamistas en Europa, por parte de inmigrantes o europeos descendientes de inmigrantes han puesto sobre la mesa el tema de la radicalización de parte de este sector de la sociedad, Schinas ha sido claro y ha negado que haya una automaticidad entre integración y extremismo. “El riesgo está en las organizaciones extremistas que se ceban con los vulnerables. Nuestro trabajo es que nadie se vea vulnerable y se sienta excluido, que se escuche su voz”, ha añadido.
Por ello insistió en que, “antes de echar las culpas a una religión -en referencia a la musulmana-los Estados deben hacer sus deberes y facultar la aplicación del nuevo Pacto de Inmigración y Asilo”. Y añadio, “menos dramatismo, y más solidaridad y acción eficaz”. A continuación, se refirió de forma tácita a los países del Este y a los nórdicos, mas reacios a recibir las cuotas de refugiados o de inmigrantes que cruzan el mar. “Los que quieren torpedear un acuerdo europeo en migración, aprovechan el tema dela radicalización y el terrorismo para desmontar el mensaje. Ha llegado el momento de desmitificar o desdramatizar la política de inmigración volver a lo básico, la que implica responsabilidad”.
A preguntas de la prensa, Schinas fue desgranando la forma en que se pretende su inclusión, que no es otra que la asunción, no sólo de los derechos, sino “también de las obligaciones”. E insistió en que “hay dos partes incluidas: los migrantes y la sociedad ciivil. La clave es el acceso a la educación, la cultura y el mercado laboral con los mismos derechos. Y para la integración en cada ciudad y en cada pueblo es necesario erradicar los ghettos y prevenir la radicalización”.
A la pregunta de si estas políticas favorecerán la xenofobia por parte de los europeos que han perdido sus trabajo y su casa en las recientes crisis, fue contundente al afirmar que “han sido los políticos lo que lo han instrumentalizado”, en referencia a los partidos de extrema derecha. “No hay amenaza en un médico sirio que traba de taxista o en un profesor que está sobrecualificado para lo que hace, ni en las mujeres inmigrantes que sufren discriminaciones también en sus hogares. No pretendemos hacer una sociedad mejor, sino movilizar fondos europeos para que su vida sea más fácil, mejor, y puedan contribuir en la sociedad”.
No se han especificado en cifras los fondos que se destinarán a este Plan de Acción, pero ha explicado que hay más dinero en los próximos siete años, porque se va a utilizar de forma transversal desde varios departamentos. La mayoría, dijo, son recursos que la comisión no puede decidir por sí misma y “lo tienen que gastar las autoridades de los Estados miembros, especialmente los regionales”. Schinas ha defendido que hay que “reforzar estos fondos trabajando con las regiones y las ciudades, porque es ahí donde se produce la integración”.
No obstante, también fue expeditivo al referirse a las nuevas olas de inmigrantes que cruzan el mar de manos de las mafias y que logran llegar a las costas europeas, al referirse a que se les aplicará la ley de expulsión. “Hace una semana visité las Islas Canarias y hemos visto un incremento enrome de inmigrantes procedentes de la ruta del Atlántico, la ruta más mortal. No sabemos cuántas vidas se han perdido, pero la mayoría de los que llegan no son refugiados sino inmigrantes económicos que no van a recibir protección internacional en la Unión Europea”. en este sentido, añadió, “tenemos que luchar contra los traficantes de seres humanos y tenemos que devolver a los que no tienen derecho a la protección internacional”. Schinas anunció en este punto que la próxima semana visitará Marruecos para debatir la expulsión y devolución de estos inmigrantes a sus países de origen.
“La situación en Canarias es muy difícil y el Gobierno español ha hecho mucho para adecuar unas instalaciones para los inmigrantes, por lo que se ha pedido financiación adicional a la Unión”, comentó. Y, a continuación, el vicepresidente explicó la posición europea. “Estamos por la inclusión y la integración, pero todos los problemas que Europa tiene hoy en materia de inmigración, como Lesbos, las Islas Canarias o Calais, tienen una única explicación y es que no tenemos un marco común de la Unión Europea”.
Schinas estaba dirigiéndose directamente a los Estados miembros, que se niegan a ceder soberanía en esta materia y a aprobar el nuevo Pacto Europeo para Refugio y Asilo, presentado en septiembre, y que acabaría con “unas políticas fragmentadas, los cuellos de botella y los dramas”. Y añadió que, “si los gobiernos no quieren problemas como Lesbos o Canarias, la respuesta es muy sencilla, que aprueben el pacto de inmigración y que nos den un marco para afrontar la situación actual”. Schinas finalizó con un símil, dejando claro que “esto no es un árbol de navidad. No nos proponemos integrar a todos, sino a los que necesitamos, no sólo a los nacionales de países terceros sino a los europeos de origen inmigrante”.