MURCIA (EP) Expertos han destacado, en el documento 'El zumo de naranja en la dieta mediterránea', la importancia del consumo de este alimento en una alimentación sana y mediterránea debido a su perfil nutricional, la importancia de su producción para nuestro desarrollo económico, su influencia en la sostenibilidad ambiental y el disfrute que aporta su consumo.
En concreto, en el trabajo las investigadoras científicas del CSIC e investigadoras postdoctorales del Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación (UAM-CSIC), María Dolores del Castillo y Amaia Iriondo, han explicado el proceso de elaboración industrial del zumo y su impacto en la composición y calidad nutricional del alimento, comentado que la calidad de la fruta, las condiciones de almacenamiento de esta previo a su transformación, así como, las de elaboración determinan la composición, el valor nutritivo y la calidad sensorial del zumo.
Por ello, las expertas han asegurado que la selección adecuada de las condiciones de elaboración industrial es "esencial" de cara a lograr un producto de igual valor nutricional y beneficios para la salud que el zumo recién exprimido.
Tras esto, los doctores de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética del Hospital Universitario La Paz, Carmen Gómez Candela, Beatriz de León y Óscar Moreno, han analizado los beneficios nutricionales que supone el consumo de zumo de naranja para el organismo y, entre las conclusiones, han destacado que dado que el consumo de productos de origen vegetal se ha visto reducido en los últimos años, un zumo de naranja podría ser la manera de completar esa carencia de consumo, siempre que la totalidad de la dieta sea equilibrada.
Por otro lado, el equipo del grupo de investigación ImFINE perteneciente al departamento de Salud y Rendimiento Humano de la Universidad Politécnica de Madrid liderado por los doctores Marcela González-Gross, Eva Gesteiro y Alberto García-Carro, han profundizado en como el zumo de naranja está instaurado en un estilo de vida saludable.
"La evidencia científica reciente ha demostrado que el consumo diario de zumo de naranja no contribuye a la adiposidad o al aumento de peso, la resistencia a la insulina, la inflamación o la dislipidemia, especialmente si se cumplen las recomendaciones diarias de actividad física", han explicado.
Al mismo tiempo, los doctores del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA), Domingo J. Iglesias y Vicente Tejedo han subrayado la importancia del cultivo de cítricos en materia de productividad, sostenibilidad ambiental y estrategia frente al cambio climático.
De hecho, estudios recientes han demostrado que una hectárea de cítrico fija entre 7 y 9 toneladas de CO2 al año, constituyendo una herramienta muy eficaz para mitigar el cambio climático. La adaptación del cultivo a unas condiciones del entorno cada vez más adversas y la maximización de su potencial para la fijación de carbono deberán ser, sin duda, retos fundamentales que se debe plantear el sector citrícola de España durante los próximos años.
Por último, el sociólogo, periodista e investigador en el CSIC y CIEMAT y miembro del Comité Científico del Congreso Anual Gastronomía y Salud, Miguel Ángel Almodóvar, ha analizado la relación que tiene el consumo de zumo de naranja con el disfrute, así como su papel en la dieta mediterránea, y ha comentado que "la dieta mediterránea no es solo algo nutricional.
"La dieta mediterránea es una forma de vida, es disfrutar, conseguir una España sostenible y no vaciada. El problema de esta dieta es que no llega a la población y los profesionales no están sabiendo llegar al consumidor. Tenemos que gastar en alimentación y no en medicación, una buena dieta puede evitar muchos problemas de salud y sin duda el zumo de naranja debe formar parte", ha zanjado.