MADRID. El dilema sobre AstraZeneca crece en Europa. Este martes se produjeron dos decisiones contradictorias sobre la estrategia a seguir sobre la vacuna cuya administración fue suspendida a mediados de marzo debido a una posible relación con casos de trombosis que, de nuevo, ha vuelto a aparecer.
La alarma saltaba en Alemania. Allí, concretamente en los estados de Berlín, Brandenburgo y Renania del Norte-Westfalia y en la ciudad de Múnich, se optaba por suspender la puesta de este fármaco para menores de 60 años. Una decisión a la que, posteriormente, se sumaba la comisión de vacunación del país germano, que recomendaba no administrar la vacuna de AstraZeneca a personas por debajo de esa edad.
Una postura que contrasta con la nueva estrategia de vacunación anunciada también este martes por parte del Ministerio de Sanidad. Un documento todavía no hecho público pero que, según el comunicado emitido por el departamento que dirige Carolina Darias, apunta a una línea continuista respecto a los grupos de vacunación vigentes hasta ahora, aunque con una modificación en el orden de los grupos de vacunación que, de hecho, ya estaban aplicando algunas CCAA como la valenciana.
La situación es paradójica. Inicialmente, esta vacuna fue destinada en España -y en varios países europeos- sólo a personas de hasta 55 años, al considerar que no se disponía de datos suficientes respecto a grupos de mayor edad. Tras el episodio de los casos de trombos y la paralización de la puesta de esta vacuna, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) avaló el medicamento e incluso la ampliación del límite de edad para su aplicación. En España, se autorizó su administración hasta los 65 años.
Además, desde el Gobierno de España se avala la prioridad de los grupos esenciales para la vacunación con AstraZeneca independientemente de su edad: o lo que es lo mismo, se seguirá usando al mismo ritmo el fármaco que, para Alemania, debe emplearse solo para mayores de 60 años. El motivo de la recomendación -en algunos estados, obligación- de administrar dosis de AstraZeneca solo a personas mayores de 60 años se debe a la aparición en los últimos días de 31 casos de trombosis, todos menores de esa edad y en su mayoría mujeres, con un total de nueve fallecimientos.
En cuanto a las variaciones de la nueva estrategia del Ministerio de Sanidad, llama la atención el cambio en el grupo 8, que ahora pasa a conformarse con todas las personas de 56 hasta 65 años. Hasta ahora, las personas de entre 60 y 65 años pertenecían al grupo 5C y, por tanto, debían ser vacunadas antes que el grupo 6.
Tras este cambio, según el comunicado del Ministerio, se seguirá vacunando con AstraZeneca a los grupos esenciales restantes (todo tipo de personal sanitario y sociosanitario -3B y 3C-; policías, bomberos y militares -6A- y docentes de primaria y secundaria -6B y 6C-) para a continuación, proseguir con el grupo de edad citado.
Ahora bien, muchas autonomías habían priorizado, justamente, a estos menores de 65 años por ser personas más vulnerables y con más riesgo que los jóvenes de tener que ser ingresadas o incluso morir en caso de contagio. Así lo han hecho una decena de CCAA. El ministerio permite simultanear a los citados grupos: o lo que es lo mismo, cada Comunidad Autónoma tiene margen de maniobra bajo el gran paraguas de la estrategia de vacunación general.