CARTAGENA. "Me inspiro en las cosas que veo, también en mis sueños, en otros artistas, desde Velazquez hasta nuestros días; todo reinterpretando la historia del arte", cuenta el artista cartagenero Pablo Torres, quien ha sido el encargado de reinaugurar con su exposición Mysticsurr la sala de exposiciones Domus Porticus de Cartagena, anteriormente conocida como Muralla Bizantina, que ha sido remodelada y a la que se le ha cambiado el nombre al demostrarse que los restos arqueológicos que alberga pertenecen a una vivienda romana (no a la muralla bizantina como se creía en un principio).
La sala se ha vestido para su 'reinaguración' de los vivos colores con los que Pablo Torres -usuario de la Asociación para la integración comunitaria de enfermos psíquicos de Cartagena y Murcia (Ápices)- reinterpreta la historia del arte desde un punto de vista mágico, pop, surrealista y místico. Mysticsurr, que estará expuesta hasta el 23 de mayo, está compuesta por 25 láminas pintadas en acrílico con las que el artista pretende que el visitante se sumerja en un viaje fascinante por el mundo del surrealismo pop y ponga un poco de color a estos tiempos grises.
Castejón ha querido destacar la figura de Pablo Torres. "Sus impresionantes trabajos no pasan para nada desapercibidos, es un artista activo que muestra una visión del mundo alegre", ha dicho la regidora, para añadir que "a través de estas 25 láminas vamos a conocer un mundo mágico, un mundo muy colorido, con un toque de aire pop y también algo místico que convierte en obligada la visita a la Domus Porticus".
Por otra parte, la alcaldesa de Cartagena, la vicealcaldesa, el teniente de alcalde y el concejal de Cultura han visitado las instalaciones de la sala tras su remodelación, después de la cual ha pasado a denominarse Domus Porticus para ajustarse a la historia. Y es que las investigaciones científicas han demostrado que los restos arqueológicos que albergan estas dependencias no pertenecen a una muralla bizantina, tal y como se había supuesto cuando se descubrieron, sino a una vivienda romana que posteriormente fue demolida y se utilizó como parte del pórtico que daba acceso al jardín del teatro romano. Por este motivo, y con el objetivo de evitar errores de interpretación del yacimiento, se ha decidido cambiar el nombre de la sala, que pasa a denominarse Domus Porticus.
"Este lugar fue un espacio dedicado a la cultura y el ocio en época romana y, ahora, en pleno siglo XXI, mantiene esa esencia al acoger esta magnífica sala de exposiciones que hoy pasamos a denominar Domus Porticus. En el último año, desde la Unidad de Patrimonio Histórico-Artístico hemos trabajado para reconocer a este yacimiento el valor que le corresponde, ocupando un lugar destacado dentro de la oferta cultural y artística de Cartagena", ha explicado Castejón durante la inauguración.
Las obras de remodelación comenzaron en junio con los trabajos de conservación y mantenimiento de las estructuras del yacimiento. Durante este proceso también se llevaron a cabo diversas analíticas y diagnósticos para la protección de los mosaicos, que se han rehabilitado. En noviembre comenzaron los trabajos para diseñar una recreación en tres dimensiones de la Domus Romana, que ha permitido actualizar, renovar y ampliar la información sobre estos restos sobre los que se construyó el pórtico posterior a la escena del Teatro Romano. En total, la Concejalía de Patrimonio Histórico ha invertido en estos trabajos de recuperación y rehabilitación más de 55.000 euros.
Además, la Concejalía de Cultura, que dirige David Martínez Noguera, ha llevado a cabo diversas reformas encaminadas a mejorar la calidad expositiva de la sala, como pintura de la fachada y de paredes y techos; cambio de todas las guías y focos de iluminación de las obras expuestas; reparación de los compresores y entronques de los aires acondicionados y mejoras en el almacén.