opinión

El lobo empieza a asomar y no tomamos nota

El autor invita a las pymes a explorar fuentes de financiación alternativas que reduzcan su dependencia bancaria en un entorno de oligopolio financiero

19/01/2021 - 

VALÈNCIA. Uno tiene la sensación de estar reviviendo aquellas películas de dibujos animados en las que el correcaminos se lleva siempre la pieza y al coyote, asediado por el cazador, le pasa un camión por encima. Esto da la sensación de déjà vu y nos sabemos el final. 

Corría el año 2008, recién inaugurada la crisis financiera cuando la banca española aún estaba en la Champions League, cuando contando entidades financieras el grueso del negocio bancario español estaba en manos de 62 entidades. La cosa de la banca y la liquidez se puso fea y empezó el baile. Por poner ejemplos lejanos, Santander ya se había hecho con Banesto, Popular integraba Crédito Balear, Castilla, Vasconia y Galicia.

Muy poco después la 'fusión fría' de Bankia, el advenimiento de Banca Cívica, la adquisición de Guipuzcoano y CAM por Sabadell, CCM a Cajastur... Ahorro al lector la larga ruta. De aquellos 62 quedan 11 y se prevé que queden menos aún ya que Caixabank está pendiente de la absorción, perdón, de la fusión con Bankia, BBVA y Sabadell han roto un proceso similar, y a menor escala entre otros Unicaja y Liberbank también hablan de matrimonio financiero.

¿Resumen? Tres grandes actores y el resto a esperar su momento que será más pronto que tarde. No extrañe que los que rompen su noviazgo vuelvan a hablar con el tiempo, breve, para poder mantener su estatus. Da igual, a los efectos de este análisis, que se hayan roto las conversaciones entre BBVA y Sabadell, ya que este proceso no lo va a parar nadie y si no cabe esta operación aún, es posible que vengan otras que la puedan suplir. La competencia ayuda más para la eficiencia que la concentración, pero estamos en tiempos en los que se concentra el negocio bancario con la convicción de que así se resolverán los serios problemas de cuenta de resultados y capital que existen.

Solo recordar que es la buena gestión la que diferencia a los mejores de los otros y que el comportamiento de rebaño solo augura que el gestor salve su trasero por hacer lo mismo, bueno o malo, que los demás gestores.

¿Y después de todo esto qué?

Pues que el lobo de concentración viene y que la posición dominante de tres actores tendrá mucho que decir sobre la financiación de las empresas en España. No se preocupe mucho Ud. si representa a una gran empresa, mal que bien les necesitan. Pero si usted es pyme, pero pyme pyme, lo tiene crudo, lo siento mucho. Sepa que su riesgo consume más capital del banco porque tiene peor rating y que con la actual situación de tipos de interés ya le pueden poner precio alto que ni aun así les compensa. Querido amigo lo suyo es sufrir y mendigar, pero no tendremos el mal gusto de decirle el año que viene aquello de “ya se lo dije”.

¿Consecuencias?

Gestores alejados de los clientes y departamentos de riesgos alejados de los gestores, centros de decisión cada vez más alejados y baja autonomía de decisión. Mucho proceso y poco comportamiento de pago, más informes y menos proximidad. Déjenme que les aporte un par de datos más de variables de la industria bancaria: En el periodo 2014-2020 hasta el pasado 30 de junio se han eliminado 8.477 oficinas bancarias y, en cuanto al empleo, desde 2014 al cierre de 2019 se habían eliminado 26.500 puestos de trabajo. Resulta curioso que si ampliamos el periodo medido a 2011-2019 se han eliminado 94.017 puestos de trabajo en las entidades financieras nacionales, casi un 40 % del empleo del sector.

Caben mil conclusiones sobre los costes 'ahorrados' y sobre que el eje de la gestión sigan  siendo las reducciones de plantilla, pero quiero destacar una conclusión muy primaria: se ha perdido mucho conocimiento y confianza en el cliente, lo que supone que las pymes tienen estructuralmente más dificultades, son cada vez mas desconocidas y no tienen con quien hablar.

¿El futuro?

Como le decía, mal lo tienen las pymes, porque alguien en alguna parte decidirá si su empresa es viable o no. Si lo es, a precio de 'mercado' seguirá teniendo alguna chance, pero si decidiera que no lo es, amigo mío prepárese para sufrir de lo lindo. No le digo si, como práctica al uso, usted garantizará personalmente su deuda bancaria. Un futuro con baja competencia es malo para las empresas, tanto por los diferenciales a aplicar como por la dependencia de las buenas o no tan buenas practicas de una u otra entidad, no le digo ya para las compensaciones de negocio exigibles. Obviamente si entra en situación de problemas o firma lo que le pongan delante o no existirá la posibilidad de remontar.

La covid-19

Como no podía ser de otra manera para construir otra tormenta perfecta, llega la covid-19 y a nuestros políticos se les ocurre que hay que facilitar el crédito a las empresas para que sobrevivan. Buena intención, pero mal cálculo, porque se esperaba una duración corta y ya se han tenido que decretar ampliaciones de plazo para las carencias y plazos de los préstamos ICO. Que haya suerte porque esta partida no ha hecho mas que empezar. Ojo, aquí a los bancos les importa 'poco', pues el riesgo, lo sume el Estado. Dicho así sonaría bien sino fuera porque 'papá Estado' quiere cobrar lo que presta, pregúntenle a la Hacienda Pública si cobra o no.

La financiación

Como no ha funcionado bien la excel del conteo de victimas de la pandemia, tampoco cabe esperar que esta historia acabe mejor. Les resumo, con la garantía de 'papá Estado' y a través de la banca se han dado miles de millones de euros para tratar de mantener las empresas vivas.

No crean que, al igual que ocurre en otros países europeos, las compañías dedicadas a la financiación como Colectual hemos podido ayudar a distribuir y mitigar el riesgo de dependencia de proveedores financieros. Aquí se ha hecho como siempre. Todos los fondos públicos se han tramitado a través de los bancos, que en buena medida han aprovechado para sanear riesgos previos con cargo al Estado y se han excluido al resto de actores de financiación alternativa, incluso los regulados por el Estado. ¿Cómo podemos esperar resultados distintos si hacemos las mismas cosas?

El crowdlending sigue siendo una de las pocas alternativas viables para las pymes, ayuda a mitigar algo la dependencia de tres proveedores financieros cuyo comportamiento a largo plazo será claramente oligopolista, tengan esto por seguro.

Estructura financiera

Vigilar la estructura financiera, utilizar todas las vías que permitan mantener una mínima independencia, hacer políticas internas de control del gasto como si estuviéramos en estado de guerra y no de alarma, centrarse en la caja, el producto, el cliente, el proveedor, defender un cierto margen que ayude a conseguir ebitdas sostenibles y repetibles, porque la deuda para subsistir hay que pagarla o la empresa colapsa.

El año que ha empezado seguro que se recordará por la situación económica más que por otros efectos. Y como todos los años, presenta oportunidades y amenazas. Sea cual sea su posición reduzca su dependencia, utilice todas sus palancas financieras, movilice más recursos financieros, sea claro y sincero con sus proveedores, incluso con los financieros. Nada de esto garantiza que Ud. vaya a poder aprovechar las oportunidades, pero al menos que las amenazas o debilidades no le derriben.

Antonio Paños es cofundador de Colectual

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