Foto: Juanchi LópezMURCIA. Con la cuenta atrás para que este jueves se vote la moción de censura contra el PP de Ballesta en el Ayuntamiento de Murcia puesta en el entorno de las 24 horas, los movimientos de última hora no se han hecho esperar. El todavía alcalde espera un giro de los acontecimientos que dé al traste con el intento de Ciudadanos y PSOE de acabar con 26 años de Gobierno 'popular', mientras que socialistas y liberales cerraban filas este martes con la presentación de su programa de Gobierno para los próximos dos años, con José Antonio Serrano como el dueño del bastón de mando de La Glorieta.
PSOE y Ciudadanos cuentan con 13 concejales y necesitan 15 para poder sacar adelante la moción, lo que, salvo sorpresa de última hora, lograrán gracias al apoyo de los dos ediles de Podemos, Ginés Ruiz Maciá y Clara Martínez. Si todo sale como esperan lograrán más de la mitad de los 29 votos necesarios para desalojar a Ballesta y su equipo y tomarán el control del gobierno local.
Pero el PP confía en que alguno de los ediles cambie de opinión a última hora y poder salvar así el control del Ayuntamiento capitalino. Todo el mundo pone la vista en que alguno de los concejales de Cs emule a sus excompañeros Isabel Franco, Francisco Álvarez y Valle Miguelez, quienes, junto a Alberto Castillo, hicieron fracasar la moción de la semana pasada contra el Gobierno regional de López Miras, ya que los tres primeros votaron en contra, y el presidente de la Asamblea regional rompió también la orden de su partido y se abstuvo en la votación.
Aunque, eso parece, a priori, muy difícil que se repita. De hecho, los cuatro ediles naranjas de Murcia, Mario Gómez, Paqui Pérez, Pedro García Rex y Juan Fernando Hernández, estuvieron este martes en Madrid y ratificaron ante la líder nacional de su partido que apoyarán al unísono la moción.
Desde Ciudadanos denuncian la presión a la que han sido sometidos sus concejales en el Ayuntamiento de Murcia, por lo que, según su coordinadora regional, Ana Martínez Vidal, "han tenido que aislarse durante unos días"
Incluso desde la formación naranja denunciaron la presión a la que han sido sometidos sus concejales en el Ayuntamiento de Murcia por lo que, según su coordinadora regional, Ana Martínez Vidal, "han tenido que aislarse durante unos días para evitar todo tipo de contactos para doblegar su voluntad por parte de miembros del PP".
Mientras, Ballesta, quien asegura que trabajará "hasta el último minuto", cree que los argumentos esgrimidos por Ciudadanos para presentar la moción son "excusas que buscan justificar una operación política en la que pretenden, de alguna manera, salvar una situación difícil que están atravesando e intentar, en un último esfuerzo, consolidarse en el ámbito nacional".
El regidor lamentaba este martes en una entrevista en el programa de radio 'Herrera en Cope' que la moción en Murcia proviene de lo que ha calificado como 'Operación Moncloa' y dejaba caer que no se presentará a las próximas elecciones para un tercer mandato. "Yo creo que mi etapa ya es un poco dilatada", remarcaba.
Preguntado por los motivos que han movido la presentación de la moción, Ballesta cree que "obedece a lo que ha sido denominada 'Operación Moncloa', es decir, que se ha generado en unos despachos de la Moncloa. En la secretaría general de Presidencia se decide una operación política a nivel nacional y se llama a los vicesecretarios generales del PSOE, José Luis Ábalos, y el secretario general de Ciudadanos, el señor Cuadrado, para iniciar una operación que a ambos les interesa. Esta operación deciden iniciarla en Murcia y hacerlo, además, de manera simultánea en la Comunidad y el Ayuntamiento", explicaba.
El regidor popular remarcaba que él si cree "en la ética política" y hasta el último momento estará "defendiendo los principios y valores" que son los que le hicieron "venir aquí y si esto se pierde, retornaré a mis paraísos perdidos", a la vez que recordaba que "hemos ganado dos veces seguidas las elecciones, con amplía mayoría en Murcia. Tenemos el respaldo de los murcianos".
