Hoy es 22 de noviembre

tribuna libre / OPINIÓN

Dolor, rabia, desesperanza y sin empleo

19/03/2020 - 

Los síntomas de la pérdida de un empleo son casi similares a la pérdida de un ser querido. Experimentamos una serie de fases, empezando por la negación y la rabia, hasta poco a poco y en el mejor de los casos la asimilación y vuelta a una normalidad que nunca será la misma. Pero para ello están los especialistas que ayudan a atravesar dichos momentos y sobre todo a organizar “las cabezas” de las personas para enfocarse a encontrar en empleo. 

Desde que creé Fundación Equipo Humano siempre pensé que un proceso de recolocación no es solo un proceso de búsqueda de empleo, sino que es algo mucho más humano, más cercano, donde lo primero que hay que hacer es una acogida en condiciones, como personas. De ahí que cuando nos piden propuestas de recolocación les diga que dedicaremos el tiempo necesario a acoger a la persona, a tranquilizarla, a mirar las oportunidades, etc., y en muchas ocasiones las personas que nos contratan nos felicitan por dar ese paso tan personal. 

La experiencia de haber ayudado a mas de 12 mil personas en estos 10 años, me ha dado la perspectiva de que los procesos de recolocación, se deberían llamar procesos de recuperación  de la persona. No son un número, no son una letra, son personas como tú y como yo. 

Al principio no os voy a engañar, parecía como un ente extraño que quería hacer las cosas de forma diferente y orientarse mucho más a las personas y a sus emociones para saber como gestionarlas para recuperarlas. La autoestima, el autoconcepto, etc., palabras utilizadas por por todos en algún momento era el primer paso. Esta perspectiva nos hizo que fueramos incluidos en el Acuerdo Marco de Agencias de Colocación firmado a nivel nacional en el año 2015 y de esta forma optar a proyectos donde podíamos atender a más de 4 mil personas por ejemplo en la Xunta de Galicia. Pero siempre con la misma esencia, la persona en el centro del proceso. 

Por otro lado, me sorprendía que siempre fueramos medidos por la “tasa de inserción laboral” que conseguíamos, pues sí es un buen indicador para conocer si el procesos llevado a cabo había sido el correcto, pero en escasos casos nos preguntaban por la felicidad de las personas. Esa satisfacción consigo mismo que habían ido recuperando después de un proceso de duelo y que al final se había materializado en encontrar un empleo. Pues sí, no he dedicado la mitad de mi vida estudiando las mentes de las personas para ceñirme a un indicador, sino para comprender, empatizar y ayudar desde dentro de las mentes de las personas a conseguir ese trabajo tan deseado. 

El COVID 19 nos trae una avalancha de ERTES y de ERES, de personas en situación de desempleo con una duración indeterminada, donde las causas son evidentes, la falta de actividad económica hace que las empresas no tengan trabajo para realizar y por tanto las medidas son la sostenibiliad de la empresa, pero principalmente porque el sistema laboral está organizado de esta manera. A todos nos ha pillado desprevenidos, no solo al gobierno sino a los propios ciudadanos que veíamos las noticias de China y pensábamos que nunca a nosotros nos iba a ocurrir. Pero ha llegado y con mucha fuerza, como una gran ola que sacude todo y te deja desamparado. Así que ahora desde este mismo momento debemos de empezar a trabajar en recuperar el ánimo, la autoestima, reducir la rabia y el dolor, y empezar a asimilar que esto está ocurriendo y que tardaremos al menos unos meses en recuperarnos, pero con la cabeza alta e intentado en todo momento que no nos supere. 

Como humano que presido una Fundación destinada a las personas, al empleo, pongo todos los medios disponibles para recuperar esta autoestima, para dar horizonte a las personas en estas situaciones en las cuales se aprecia más que nunca el estar acompañado, como yo lo estoy con mi familia, amigos y equipo de trabajo. Por último, agradecer a las autoridades sanitarias y a todas las personas que trabajan en ellas por la labor realizada y por estar ahí cuando se les necesita. Nosotros también estamos disponibles. Un abrazo de humano a humano.  

José Enrique García es presidente de Fundación Equipo Humano

next