MURCIA. Cada vez son más las personas que al recibir un picotazo de una avispa o abeja, tiene una reacción alérgica grave. La mayoría de estos casos se producen en verano, cuando estos insectos están más activos y aumentan las actividades al aire libre.
Además, este año la cantidad de insectos ha aumentado debido a las condiciones meteorológicas y al confinamiento por la crisis sanitaria, y es por eso que las actuaciones de rescate del enjambre se ha incrementado con respecto al año pasado. Una de cada mil personas sufre reacciones alérgicas generalizadas por el veneno de himenópteros.
Por ello, conveniente no acercarse a panales de abejas ni a nidos de avispas y, si uno de estos insectos se posa sobre alguna parte del cuerpo, no intentar matarlo ni espantarlo y permanecer quieto o hacer sólo movimientos lentos hasta que se aleje, así como evitar, en la medida de lo posible, comer en el campo, ya que los insectos acuden a los alimentos.
Otras recomendaciones generales cuando se sale al campo son usar ropa que cubra la piel, con manga y pantalones largos y calcetines, así como evitar los colores oscuros y brillantes, que atraen a los mosquitos, y no utilizar perfumes muy fuertes. Se aconseja también mantener una correcta higiene corporal, porque la sudoración y los olores fuertes atraen a estos insectos. Por otra parte, si deja ropa en el suelo o tendida en el exterior conviene sacudirla antes de ponérsela, pues puede haber alguna avispa entre sus pliegues.
Tras la picadura, una reacción local de hasta 10 centímetros con dolor o molestias se puede considerar normal o no excesivamente preocupante. Si la reacción es mayor de este tamaño o presenta síntomas tipo urticaria generalizada, mareo, náuseas, vómitos, sensación de asfixia, o hipotensión, son datos considerados de gravedad y requieren consulta con el alergólogo.
En caso de picadura de cualquier insecto, la primera medida es lavar abundantemente la zona con agua. En caso de picaduras concretas como la de abeja suelen dejar el aguijón, de modo que es necesario retirarlo cuidadosamente sin romperlo y alejarse de la zona para impedir picaduras masivas. Tras lavar con agua se puede aplicar una bolsa de hielo o cualquier sustancia que proporcione frío en la zona durante unos minutos para aliviar el dolor y la inflamación.
Los pacientes con antecedentes de reacción alérgica generalizada grave (anafilaxia) por veneno de himenópteros o por otras causas, deben auto-administración de adrenalina, y acudir al centro de urgencias para comprobar la situación clínica.
En la Región de Murcia, alrededor de cien personas siguen tratamiento con inmunoterapia específica con veneno de avispas o abejas. Este tratamiento mediante una vacuna es el único procedimiento curativo en sentido estricto de la enfermedad alérgica y el más eficaz.