MADRID (EP). La fusión entre Unicaja y Liberbank podría dar lugar al cierre de unas 110 oficinas repartidas por todo el territorio español o el 5% de la red combinada, según los cálculos realizados por Bain&Company, que ha analizado en un informe los posibles solapamientos. Si bien se constata la existencia de un exceso de capacidad, la combinación entre ambas entidades tendría un menor impacto que otras opciones, como la posible unión entre BBVA y Banco Sabadell, que derivaría en la necesidad de un ajuste de al menos 1.250 sucursales.
Para Bain&Company, una operación de consolidación entre Unicaja y Liberbank, la cual continúa analizándose, supone "una gran oportunidad" para mejorar la eficiencia, y recuerda que el Banco Central Europeo (BCE) solo solicitará unos requisitos de capital iniciales iguales a la media ponderada a los requisitos del Pilar 2 de las entidades que se van a fusionar.
En el caso de la fusión entre CaixaBank y Bankia, la firma cree que existe una redundancia geográfica potencial de unas 1.410 oficinas, es decir, un 23% de la red, siendo Madrid y la Comunidad Valenciana las regiones que mayores solapamientos registrarían. De este modo, esta operación supone el solapamiento de entre un 15 y un 25% de sus sucursales, lo que hace suponer que la entidad resultante de la operación podría reducir su red de oficinas y esto derivaría en que otros bancos implementasen acciones similares para ser más competitivos.
A pesar de la importante reducción de la red de oficinas en los últimos años, España todavía tiene un gran número de sucursales en comparación con otros países. Así, uno de los efectos podría ser la aceleración de la optimización de las sucursales bancarias. Asimismo, la crisis provocada por la pandemia del coronavirus ha exacerbado la situación actual, disminuyendo las expectativas económicas de los bancos y empeorando sus balances debido al previsible aumento de la morosidad. Todo ello ha provocado una importante reducción del valor contable de los bancos de todo el mundo.
Concretamente, el valor contable de las entidades bancarias españolas se redujo en torno a un 60% entre 2019 y 2020. Esta situación macroeconómica, junto con el bajo nivel de consolidación que existe en el país, supone un contexto "muy propicio" para las operaciones de fusión y adquisición como vía para el fortalecimiento del sistema.
Por otra parte, este tipo de operaciones de consolidación también suponen un impacto sobre el sector asegurador, dando pie a una nueva reconfiguración de las relaciones entre bancos y aseguradoras en España y sus acuerdos de exclusividad para la distribución de productos, cuya importancia tiene cada vez más peso en el mercado. Según los ejecutivos de CaixaBank y Bankia, el nuevo banco resultante de la operación tendrá que finalizar su relación con Mapfre, compañía que deberá iniciar la búsqueda de un nuevo 'partner' en bancaseguros y que previsiblemente derivará en una nueva reconfiguración del mapa de alianzas.