CARTAGENA. Edificios bajo el grave riesgo de derrumbe, arreglo de cornisas, vallados perimetrales y consolidación de fachadas. Urbanismo ha tenido que actuar de urgencia y de forma subsidiaria durante los dos últimos años en cerca de 38 construcciones que amenazaban la seguridad de los vecinos de la ciudad, debido a la inacción de sus propietarios para ejecutarlas.
En total, estas obras han supuesto un coste de 283.000 euros para las arcas municipales. “El Ayuntamiento se ha hecho cargo de ejecutar estos trabajos debido a la inacción de sus propietarios y en base a la urgencia que recogían cada uno de estos expedientes. En cualquier caso, los legítimos propietarios deberán abonar el importe de las obras”, ha afirmado la vicealcaldesa.
Entre las ejecuciones que se han llevado a cabo entre 2020 y 2021, se han realizado obras de demolición en las calles San Antonio de Santa Lucía, Casas del Caete, Subida al Cabezo de Los Mateos, muro ilegal en el Rincón de Tallante, Francisco Jorquera de Santa Lucía, Subida al Cabezo de los Palos en Los Mateos, calle Prefumo de Barrio Peral, zona pública ocupada en La Manga, así como la demolición completa del edificio, limpieza y vallado del solar de la calle de la Gloria.
También se han reparado fachadas en calle Churruca, San Fernando, Submarino, Peroniño, De la Gloria, Duque, Canales y Beatas y se han hecho otros trabajos de diversa índole como la consolidación y refuerzo en la calle Enrique Granados de El Bohío, retirada de bajantes en Santa Florentina, arreglo de cornisas en El Palmero, sellado de pozo peligroso en Cala Dorada, cierre y tabicado de ventanas, vallado perimetral de un pozo en El Golguel o la reparación de un vallado en Canteras.
