Un momento de la presentación. Foto: AYUNTAMIENTO DE MURCIAMURCIA. La ciudad de Murcia acogerá este próximo fin de semana, del 1 al 3 de diciembre, la séptima edición del Torneo Internacional MAMBAsket, competición de baloncesto para veteranos que se disputará en ocho pabellones, incluirá 94 partidos y tendrá a 60 equipos participantes.
Esta miércoles tuvo lugar el acto de presentación del Mamba en el Palacio de los Deportes de Murcia con la presencia del concejal de Deportes del Ayuntamiento, Miguel Ángel Noguera; el director general de Deportes de la Comunidad Autónoma, Francisco Javier Sánchez; y Fernando Zaplana, responsable de este proyecto creado en la Región, que ya está consolidado y que cada año atrae a más participantes de diferentes países, tanto que es a día de hoy el mayor de Europa de sus características y está entre los más importantes a nivel mundial.
Noguera explicó que "es un evento muy importante para el Ayuntamiento de Murcia, desde el que apostamos por este deporte".
Mientras, Sánchez, puso en valor el campeonato diciendo que "reunir a 900 personas de 11 países en la Región de Murcia y que vienen a practicar el deporte que más les enamora es para nosotros muy importante".
Por su parte, Zaplana apuntó que "el visitante viene a hacer deporte a Murcia, viene a hacer baloncesto y, sobre todo, a hacer turismo".
Además comentó que este proyecto no podía haber salido adelante sin el apoyo de la Comunidad, el Ayuntamiento y los diferentes patrocinadores.
"Tenemos equipos venidos de toda Europa y jugadores de los cinco continentes", indicó el organizador.
Cabe recordar que casi todos los participantes superan los 40 años de edad e incluso algunos los 60 años.
Además del programa deportivo también se celebrarán otras actividades que tendrán lugar en el hotel Agalia, entre los que se destaca un homenaje a Encarna Hernández Ruiz, conocida como La Niña del Gancho, una lorquina que fue pionera y referente del baloncesto femenino en España y que falleció en diciembre de 2022 a la edad de 105 años.
Esta jugadora y entrenadora, que residía en Barcelona desde 1929, dejó un gran legado y lecciones de vida.
