MURCIA. Más de una ceja será elevada con el próximo recibo de la luz. No es para menos, pues ha batido precio récord en cinco días seguidos, cada uno más caro que el anterior en una tendencia que dejaba indefenso al cliente en plena ola de calor, pues apagar el aire acondicionado nunca fue una posibilidad. En consecuencia, las familias que busquen una manera de ahorrar en la factura de la luz sin reducir el consumo están empezando a mirar con ojos cada vez más golosos a las placas solares para el autoconsumo.
Así pues, al dejar de recurrir a la red eléctrica en la totalidad de consumo el precio de la luz se ve reducido. El delegado de Unef en la Región de Murcia, Pedro Roca, calcula en un 30% el ahorro generado en caso de no modificar los hábitos de consumo, lo que puede aumentar hasta un 50% en caso de adaptar las tareas más costosas a los momentos de mayor luz solar.
Asimismo, sería una forma de contribuir a la creación de energía renovable, ya que además de sanar las carteras también resultan beneficiosas para el medio ambiente por su falta de contaminación.
Por supuesto, la mayor pega que genera este tipo de energía es su elevado coste inicial, pues la instalación supone entre 4.000 y 7.000 euros de media en los hogares murcianos, una cifra que se tarda entre 6 y 8 años en poder rentabilizar, de acuerdo con los cálculos de Selectra.
Asimismo, los trámites legales también pueden llegar a resultar un inconveniente para el pequeño consumidor. De acuerdo con Roca, en unas dos semanas podría ser suficiente para completar los requisitos administrativos y adquirir la licencia de obra en caso de ser un particular, aunque en el caso de una comunidad de vecinos este proceso podría alargarse hasta más de tres meses. En cualquier caso, "la instalación no tarda más de un día o dos", según indican desde la empresa del sector Trisolar.
No obstante, en la Región también encontramos varias ayudas al autoconsumo que hacen más sencillo afrontar esta elevada cifra de instalación. En concreto, la más destacada proviene del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que incluye una Subvención al Autoconsumo que cubre hasta el 40% en el caso de particulares y hasta el 40% para empresas del coste de la instalación (65% si la instalación cuenta con una batería).
Los habitantes de algunos municipios murcianos cuentan con un incentivo adicional, bonifican con un descuento en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) la puesta en marcha de instalaciones fotovoltaicas.
Cieza bonifica un 50% durante cinco años, así como Yecla. Santomera un 50% durante tres años. Por último, Molina de Segura un 40% durante tres años. Además, la instalación de paneles solares para autoconsumo tiene deducción en el IRPF. Esta deducción cubre el 10% del coste de la instalación fotovoltaica tanto en la vivienda habitual como segunda vivienda, con un límite máximo de 1.000 euros.
Por su gran ventaja en horas de sol, que alcanza las 3.500 al año, la Región también se posiciona como uno de los lugares más codiciados para aprovechar la energía solar, tal y como demuestran las empresas que instalan campos fotovoltaicos en territorio murciano. Al fin y al cabo: "La región de Murcia siempre ha sido pionera en consumo fotovoltaico", reconoce Roca.
Por tanto, vaticina que en los últimos años la demanda seguirá creciendo de manera estable por lo menos durante los próximos cinco años. En ese sentido, alude al incremento de consumo de luz en la sociedad: "El usuario cada vez consume más electricidad, por lo que van a necesitar un apoyo en la factura eléctrica. Por tanto, el mercado seguirá en alza", asegura el delegado regional de la Unef.
