En el verano de 1999 el entonces llamado Recreativos Orenes pidió la cesión de los dos jóvenes jugadores al Barça, que no accedió y a cambio "envió" a Murcia al base de su cantera Chema Marcos. Dos décadas después la afición murciana se ha quedado con las ganas de ver en acción a Pau contra su equipo, aunque sí ha podido disfrutarlo jugando con la selección española