No solo era un agente de la Gestapo y la Falange, aparte de perseguir a los republicanos más destacados que habían escapado a Francia, se dedicó a desvalijarlos. Además, montó una organización para ayudar a los judíos perseguidos por los nazis que tuvo como fin robarles todos sus bienes. Incluso en sus últimos años en activo en Bélgica, siguió robando dinero de la embajada española, pero por fin fue descubierto. Entre sus víctimas, Companys, Azaña y un gran olvidado, Zugazagoitia
Ha sido una revolución. La prensa británica ha revelado que las búsquedas en Google de "vuelos a Chernobyl" han sido mayores que "vuelos a Magaluf". Una búsqueda en Instagram con localización Chernobyl no muestra más que turistas haciéndose selfies y posados de dudoso gusto. Antes, en 1999, Nikolaus Geyrhalter retrató lo que fue la zona de exclusión y a las personas que trabajaban en ella cuando "la zona" no estaba abierta al público. Un escenario mucho menos festivo
Censurado por el franquismo -durante muchos años nunca se vio entero- 'Juguetes rotos' fue un documental pionero. Manuel Summers se dedicó a buscar a los ídolos de su infancia y se encontró a ancianos olvidados y abandonados. Algunos viviendo en hospicios, otros al borde de la pobreza, señalados por la calle con pena por la gente. Su obra, más allá de su contenido, constituía un fresco de la España del desarrollismo, de la miseria social y la amnesia de un país que ya no era el de antes de la guerra pero tampoco el de después
Sus Siete Dogmas en los que abogan por el respeto a la libertad y la dignidad de todas las personas, sus campañas para ayudar a los sin techo y su obsesión con que una creencia no puede anular una teoría científica sitúa a los seguidores del Templo de Satán estadounidense más cerca de los cristianos de base que de otra teoría. Un documental, Hail Satan? recorre el movimiento durante los últimos años y muestra por qué merece respeto: están amenazados por sufrir un mass shooting en cada acto que realizan