MURCIA. Postres y Dulces Reina SL, la empresa con sede en Caravaca especializada en la producción y comercialización de productos lácteos y de confitería, recibió una de cal y otra de arena en el resultado de su ejercicio correspondiente al 2022, pues incrementa su facturación hasta romper la barrera de los 100 millones de euros al tiempo que su beneficio se ha visto reducido un 95%.
En concreto, esta firma obtuvo una cifra de negocios de 111 millones de euros en el pasado ejercicio, lo que equivale a superar en un 27% su resultado del año anterior, cuando sus ventas se establecieron en los 87 millones de euros. Este resultado se debe a la consolidación comercial que se inició en ejercicios anteriores y que resultado clave en el 2022, de acuerdo con el análisis que realiza la propia compañía en su hoja de resultados.
No obstante, este buen desempeño en el apartado comercial quedó eclipsado por el beneficio obtenido en el pasado año, pues este quedó cifrado en los 216.000 euros netos. Dado que en el 2021 Postres y Dulces Reina obtuvo unas ganancias de 4,3 millones, esta evolución supone perder el 95% de su resultado en tan solo un ejercicio. De hecho, esta compañía venía destacando por contar con una notable solidez en sus beneficios, pues estos ascendían hasta los 5,2 millones en el 2020 y hasta los 7,9 millones en el 2019.
Cabe recordar que, junto con el negocio establecido en Caravaca, Postres Reina cuenta también con una filial portuguesa. En total, cerró el 2022 con un volumen comercializado de 71.500 toneladas y unos ingresos de 129 millones de euros. Asimismo, Reina es la cabecera de un grupo alimentario que incluye también a Cafés Salzillo o a Postres Montero, entre otras, con unas ventas conjuntas de 159,6 millones de euros.
Una de las inversiones más destacadas que ha realizado en los últimos años la empresa con sede en Caravaca es la puesta en marca de un nuevo centro logístico que tuvo un coste de 9 millones de euros y ocupa una extensión total de 7.200 metros cuadrados.
Además de las mejoras logísticas que supone este nuevo centro, que centralizará a partir de ahora toda la actividad del grupo, también impulsará el resto de la actividad al permitir que el espacio liberado en la fábrica de Postres Reina se aproveche para otros asuntos. Así, la compañía espera racionalizar y optimizar su espacio productivo en Caravaca, además de acometer mejoras de eficiencia y digitalización.