MURCIA. "Fernando López Miras es el presidente murciano con más proyección nacional de todos los que hemos tenido". Quien así lo sostiene es el politólogo Francisco Javier López Carvajal, uno de los autores de los barómetros que elabora el Observatorio Español de Estudios Demoscópicos (OBEDE) de la UCAM. El presidente que en 2017 llegó al Palacio de San Esteban de manera accidental, con la etiqueta de interino y eventual, se ha convertido con el paso de los años en uno de los barones más asentados de todo el país. "Se despojó de la bisoñez de los inicios y evolucionó hacia una marca de juventud, como parte del relevo generacional que se produjo en la política española hace una década", analiza Carvajal a preguntas de Murcia Plaza. Además, "se desenvuelve bien mediáticamente".
"Las baronías de los 90 han cambiado mucho", apunta el politólogo. "Entonces nos informábamos por las radios y los periódicos. Hoy día la información es global", en plena era de las redes sociales. "Isabel Díaz Ayuso, por ejemplo, lo sabe muy bien, pues coloca su mensaje nacional en todo el país, a pesar de que es una presidenta autonómica". Y en el caso de López Miras, "utiliza una doble lectura: se adapta al foco". En Madrid, "pulsa una tecla nacional, pero en la Región se mueve en clave regional, a diferencia de Ayuso". De hecho, añade, "en sus apariciones en medios nacionales aboga por una imagen de moderación" pese a que gobierna con Vox en la Región.
Ramón Luis Valcárcel, a pesar de su fiabilidad para los populares por sus "apabullantes" victoriales electorales, "fue un presidente con vocación regional, muy centrado en las tareas locales, con políticas muy regionalistas, y no era muy conocido en el resto del país, salvo por su lema 'Agua para todos', que sí logró trascender al sureste español". Alberto Garre, hoy en Vox, "apenas tuvo poco tiempo para proyectarse" y la andadura de Pedro Antonio Sánchez, que también duró poco, estuvo marcada por los escándalos judiciales.
La asignatura pendiente: influir en un Gobierno de España
En cambio, "López Miras apuesta por darle una visibilidad a su partido en el ámbito nacional que no hicieron sus antecesores", señala el politólogo. "Ha puesto el altavoz del PP regional en Madrid, pero... todavía le queda por hacer", puntualiza. "No sabemos si ese peso se vería reflejado realmente en un Gobierno de España en manos de su partido". Esa será su prueba de fuego. "Si su formación llega a La Moncloa, ahí es dónde se vería la verdadera capacidad de influencia". Una tarea crucial, habida cuenta del déficit en infraestructuras, la infrafinanciación o el problema del agua que arrastra la Región desde hace décadas.
El pasado miércoles, López Miras ejerció como anfitrión en una de las dos ponencias que Feijóo ha creado para el próximo congreso de julio. Murcia se convertía, además, en el escenario para la puesta de largo, de igual modo que Sevilla, con Juanma Moreno, lo fue el día anterior con la ponencia política. El líder del PP apostó por el murciano para el órgano encargado de actualizar los estatutos por ser "el decano de los presidentes autonómicos", como así le gusta citarle. El lorquino encabezó una comitiva formada por la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, la alcaldesa de Santander, Gema Igual, y el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Daniel Sirera.
Desde González Adalid valoraron el evento como un espaldarazo a López Miras, por ganar adeptos en Génova. ¿Significa eso que se ha convertido en uno de los barones más influyentes? En opinión del politólogo, no, porque siguen pesando las grandes locomotoras de este país, Madrid, Andalucía y (en el caso del PP) Galicia, Ayuso, Juanma Moreno y Alfonso Rueda, el heredero de Feijóo. "Pero en el siguiente escalón está López Miras", apunta Carvajal, que lo ve "por encima" de la balear Marga Prohens, el aragonés Jorge Azcón, la cántabra María José Sáenz de Buruaga o el riojano Gonzalo Capellán.
Otro factor "es su presencia mediática" en los medios de la capital. "Sabe aprovechar el momento actual que vivimos, por eso es muy asiduo en programas de la tele". Allí "se labra una imagen acorde a los liderazgos actuales, más cercanos, más jóvenes, y más centrados también". No sólo en Madrid ni en medios tradicionales. Recientemente conversó con Detective Murciano, el joven creador de contenido que se hizo famoso en La Revuelta de David Broncano y que ha entrevistado a políticos como el ministro Óscar Puente y el diputado Gabriel Rufián.
"Otra cosa cómo ven a López Miras en la Región", puntualiza el politólogo. "Aquí le conocemos mejor", por su exposición y gestión diaria. Y está sujeto a la crítica de la oposición, siempre vigilante, e incluso de su hoy socio para los Presupuestos, Vox, que apenas le da un respiro. Pero a falta de un interlocutor directo con La Moncloa (otra asignatura pendiente es que la Región no ocupa una cartera ministerial desde 2004... y no eran políticos murcianos al uso) al menos el nombre del presidente resuena en el resto del país.
