MURCIA. "Muy, muy emocionado" se declara el afamado e internacional compositor madrileño Lucas Vidal por presentar su último trabajo, Karma, en el concierto con el que el próximo sábado, 20 de noviembre, el Auditorio Víctor Villegas conmemorará su '25+1 Aniversario' (una celebración que no pudo llevarse a cabo el pasado año debido a la pandemia). Dice el músico de 37 años, con 25 bandas sonoras de películas a sus espaldas y ganador de dos Goyas y un Emmy Award, que para alguien "enamorado de la música y que ha entregado su vida a este arte" es "un verdadero honor" poner este broche a un cuarto de siglo de la historia de un escenario por el que han pasado "los grandes músicos que han puesto la banda sonora de mi vida".
Su nombre será otro de los que figuren en el 'currículo' del Villegas, ya que no hay que olvidar que Lucas Vidal, a pesar de su juventud, ya es un compositor consagrado, habiendo compuesto la música de películas y series como Palmeras en la nieve y Nadie quiere la noche (trabajos por los que fue galardonado con sendos premios Goya), Elite, Fast & Furious 6, las sintonías de la Liga Española de Fútbol, el tema de la cadena ESPN para los JJOO de Río de Janeiro 2016 (premiado con un Emmy) , así como temas para cabeceras, entre otros muchos trabajos que le han valido haber sido incluido en la lista Forbes de los 100 personajes creativos más influyentes en 2019.
Lucas Vidal estará en este concierto conmemorativo presentando Karma, el proyecto electrónico con el que pretende romper los moldes de un concierto tradicional para convertirse en una experiencia, un viaje, una eclosión de los sentidos que transporte a los espectadores a un mundo de imágenes y sonoridades profundos, impactantes y que inviten a la reflexión.
La composición musical está diseñada para ser variable, pudiendo llevarse a cabo con grandes orquestas, pero sin perder su intensidad al ser interpretada por un pequeño grupo de cámara. A nivel visual, una pantalla de gran formato proyectará imágenes y vídeos que buscarán emocionar a los espectadores, invitándoles a dejarse llevar, a fluir, a desconectar y a olvidarse de todo lo demás.
El papel de Lucas Vidal durante el espectáculo será doble: por un lado dirigirá a los músicos y por otro sorprenderá mezclando sonidos electrónicos que, unidos a los instrumentos, crearán una atmósfera única. El compositor pretende de esta manera acercar dos mundos a priori tan distantes como la música clásica y la electrónica, de manera elegante, sutil y profunda.