MURCIA (EP). El Ayuntamiento de Murcia ha dicho continuar con su "compromiso de mejorar el espacio público" mediante el servicio municipal de mantenimiento, conservación, reparación y reposición de aceras, calzadas y áreas peatonales, según informaron fuentes del Consistorio en un comunicado.
Esta actuación, que ha abarcado un total de 3.000 metros cuadrados, es considerada de interés público y esencial, pues tiene como objetivo prevenir el deterioro de infraestructuras clave para la movilidad, garantizar la seguridad de peatones y conductores y mejorar la accesibilidad urbana.
Así, mediante el programa 'In situ' se están llevando a cabo trabajos de asfaltado en varias calles de la ciudad, en tramos donde el estado de conservación hacía inviable seguir con reparaciones parciales en los barrios de San Andrés, San Antolín, San Antón y San Antonio (Santa María de Gracia).
En concreto, se ha intervenido en la calle Huerto Pomares (tramo entre Calle Bolos y Calle Entierro de la Sardina) que suma 1.350 metros cuadrados (con intervención parcial hasta Calle de La Olma); así como la calle Huerto Gambín con 570 metros cuadrados; la calle Benetúcer con 360 metros cuadrados; la calle Senda Picazo con 270 metros cuadrados; y la calle Caballos con 380 metros cuadrados .
El Ayuntamiento de Murcia, a través del contrato de mantenimiento y conservación de la vía pública, destina al anualmente más de 3 millones de euros a estas obras, que no solo incluyen reparaciones puntuales, sino también la reposición de materiales para mantener en óptimas condiciones los pavimentos y áreas peatonales.
Este plan de mejora responde a la necesidad de ofrecer a los ciudadanos un entorno urbano "seguro, accesible y en perfectas condiciones", reafirmando así el "compromiso del Consistorio con la conservación y modernización del espacio público".