MURCIA (EFE). Las asociaciones Huermur y Memoria del Sureste han recurrido al ministro Ángel Víctor Torres para exigir la protección total de la Cárcel Vieja de Murcia, denunciando que su declaración como Lugar de Memoria Democrática excluye muros vinculados a más de 520 fusilamientos, lo que permitiría su demolición y vulneraría la Ley de Memoria Democrática.

Acusan al Ministerio de firmar una resolución que, en la práctica, permite al Ayuntamiento de Murcia proceder a su demolición.

Los colectivos memorialistas advierten de que la destrucción de estos elementos supondría una grave violación de la Ley de Memoria Democrática y un atentado contra el patrimonio histórico. 

Consideran que los muros son parte esencial del valor simbólico del lugar y recuerdan que en otras ciudades, como Madrid, se han protegido estructuras similares. 

Además, denuncian que el Ayuntamiento ha iniciado obras que incluyen el vaciado del edificio, el derribo de muros y la apertura de un restaurante dentro del recinto penitenciario, lo que califican de "banalización" de la memoria represiva.

En su recurso, solicitan la paralización inmediata de las obras, la protección completa de los muros y patios, la revisión del proyecto financiado con fondos europeos, y la reposición de los tramos ya derribados. 

Alertan que, si no se actúa con urgencia, acudirán a instancias internacionales como la ONU y el Consejo de Europa. 

“Derribar los muros de la Cárcel Vieja es borrar la historia y nuestro patrimonio con una excavadora. No lo vamos a permitir”, sentencian desde Huermur.