Lámparas creadas con pulpa de papel reciclado es lo que ofrece Miapulpa, un proyecto creado por la murciana Constanza López Orbea hace dos años. Esta artesana se ha inspirado en los paisajes rurales de Caravaca para crear elementos de decoración que respetan el medio ambiente y que evocan calidez y naturalidad.
Todos los productos que elabora son diferentes entre sí por el proceso artesanal que utiliza y las materias primas que ella misma crea. "Primero dejo las tiras de papel a remojo, después de varias horas se tritura y de ahí nace la pulpa de papel. El molde de las lámparas se crea también utilizando productos reciclados como macetas, flotadores o rollos de cartón. Posteriormente debe desmoldarse y lijarse, para poder aplicar el tinte", cuenta Constanza en conversaciones con Murcia Plaza.
Todo el ciclo del producto es sostenible, ya que Constanza descata que utiliza colas y pigmentos sin químicos, por lo que todo el proceso de creación respeta el medio ambiente de principio a fin. "Para mi es importante que mi proyecto vaya en consonancia con la naturaleza, desde la materia prima que se utiliza hasta la forma de crearlo. Debe ser un circulo respetuoso con el medio ambiente", aclara la artesana.
A pesar de que el proceso de creación es muy labioroso y conlleva muchas horas, Constanza asegura que la gente valora cada vez más los productos artesanos de la Región: "Yo hago mis propias materias primas y no uso ningún producto químico, por lo que todo esto proceso eleva los precios. Hay muchas personas dispuestas a pagar precios altos porque saben que son productos únicos y el sacrificio que hay detras", aclara.
Para dar a conocer su proyecto va personalmente a estudios de arquitectura o diseño y muestra sus lámparas, aunque también le gustaría llegar a espacios más amplios como hoteles. Además, a corto plazo también se plantea poner en marcha talleres en los que enseñar todo el proceso de elaboración.
Miapulpa nació como un hobbie de Constanza. A pesar de haber trabajado toda su vida como higienista dental, ya experimentaba con papel maché en casa, creando cuencos, maceteros...con el tiempo se dio cuenta de que a la gente le interesaban los productos órganicos y naturales, por lo que decidió dedicarse completamente a ello y crear su propia marca.
