MURCIA. "Estoy encantado de estar una vez más en Murcia, en esta casa que me resulta muy familiar". Con estas palabras José María Aznar saludaba a los más de dos centenares de personas que no se quisieron perder el encuentro en el Real Casino del expresidente del Gobierno con Fernando López Miras para presentar su último libro, Orden y libertad. El lugar le resultaba cercano porque precisamente hace dos años, en plena campaña electoral, ya protagonizó una charla, también con el presidente de la Comunidad como compañero de la conversación. En esta ocasión tampoco cabía ni un afiler en el Patio Azul, repleto de autoridades políticas (desde el anfitrión, el alcalde de Murcia, hasta la presidenta de la Asamblea Regional, pasando por consejeros, diputados y alcaldes), pero también hubo representantes de la sociedad civil (con decanos de colegios oficiales, presidentes de asociaciones y empresarios como Tomás Fuertes) y, por supuesto, se acercaron numerosos simpatizantes que buscaban una firma de Aznar. La concurrencia, de hecho, le recibía con una sonora ovación, con todos en pie. "Estoy muy feliz de estar aquí, y aprovecho para desearos feliz Navidad", añadía el exjefe del Gobierno de España.

Moderado por la periodista murciana Tati García, el diálogo, cuyo título era España y la Región de Murcia ante los restos del futuro, abarcó varios temas. Aznar advirtió de que "la democracia está bajo amenaza" porque, arguyó, España tiene todas las tendencias para convertirse en una demoracia "ilberal" al pasar de una situación "correcta políticamente" a un momento "abyecto". Puntualizó que la democracia "es débil pero no frágil" porque "la libertad es la fuerza más triunfadora que existe, es imparable y derrota a las tiranías", cuya última gran derrota fue el comunismo, apuntilló.

¿Y quién amenaza a las democracias? Dio tres claves: en el ámbito doméstico, "los populismos", respondió Aznar. "Ya sea el populismo radical de izquierda o de derecha; ambos piden lo mismo, se retroalimentan en todo el mundo y también en España". Esgrimió que estos fenónemenos "quieren tener un muro que excluya a quien no piensa como ellos", por eso pidió "llamar a una movilización nacional, amplia, sólida y fuerte". En clave exterior, "los regímenes autocráticos, como China, Rusia, Irán, Corea del Norte, quieren sustituir a los democráticos". Y en la esfera económica y social, "las consecuencias del desarrollo de la inteligencia artificial, que pone en cuestión los pilares morales, culturales y políticos", razonaba el expresidente.

López Miras arrancó la cita confesando que estaba nervioso. "Mi ídolo, mi referente político y en gran parte también en lo personal, coincide conmigo; por lo que no puedo abandonar los nervios", admitía, al tiempo que reflexionaba que "los murcianos tienen mucha suerte de compartir reflexiones con el mejor presidente de la historia democrática de España". "El mejor", enfatizó. "Porque fue el que tomó las decisiones más importantes para la Región de Murcia, y todos nos estamos acordando del Plan Hidrológico Nacional", arguyó. A lo que Aznar terció "sonrojado" y dijo, bromeando: "Y eso que no he nacido en El Palmar".

El mandatario regional tildó a Aznar como un "presidente generoso" y relató la anécdota cuando le pidió "ayuda" en las pasadas elecciones de 2023: "Y me dijo: dime dónde te puedo ser útil y voy a estar", contó, sin pedir exigencias. "Se puso a nuestra disposición". No en vano, quien fuera fuera el presidente de este país entre 1996 y 2004 participó hasta en cinco actos en la Región de Murcia en el frenético 2023. Pues además de mantener una charla con el propio López Miras en el mismo sitio), también arropó a al alcalde de la ciudad en un mitin en el Teatro Circo. Dos meses después, con la campaña de las generales, dio otro mitin en julio en el Auditorio Víctor Villegas, y acudió a a sendos actos políticos en Torre Pacheco y Cieza, dos municipios gobernados entonces por otras formaciones políticas. "Después de la visita de Aznar", recordó Miras hoy, "hoy tenemos dos alcaldes del PP".

Aznar reflexionó sobre el fenónemo de la polarización. "La fragmentación nace por la revolución que estamos viviendo, que ha destruido los cuerpos intermedios de la sociedad". Y ante "a la falta de respuestas, el populismo se aprovecha, porque necesita más fragmentación y más confrontación". Subrayó además que las grandes crisis del siglo XX que dieron lugar al nacimiento del nacismo, el facismo y el comunismo se producen "cuando los dos grandes partidos en Europa desaparecen y los partidos extremistas se hacen cargo de la situación". En su disertación, también recordó la figura de Antonio Maura, a quien ha dedicado tiempo estudiándolo, por su capacidad de alcanzar acuerdos: "Tenía un concepto de Estado y una dignidad que le hacía decir: en estas circunstancias de España, por mí no va a quedar".

"Un Gobierno derogó el plan hidrológico nacional a cambio de nada"

El expresidente también hizo referencia al plan hidrológico nacional, "derogado en 2004 por un Ejecutivo sectario nada más llegar al Gobierno a cambio de nada". Y lo peor, apostilló, "es que desde entonces estamos en el mismo sitio". En su opinión, "no tenemos un problema de falta de agua, tenemos un problema de no reparto, y eso es inaceptable".

No faltó tampoco la actualidad informativa. Aznar opinó que la "banda que saquea España" vaya a adelantar las elecciones porque Sánchez "no tiene ningún interés en abandonar La Moncloa", por lo que reclamó "paciencia". Y se preguntó retóricamente: "¿Por qué los miembros de la banda que está saqueando España van a querer marcharse del lugar desde donde están saqueando y desgarrado el país?". Defendió además que el único partido constitucional es el suyo, el PP. Y sobre Vox opinó que "su único objetivo es terminar con el PP y sustituirle”, por lo que expresó: "Tras unas elecciones, Vox no ayudaría a nada a la gobernabilidad de España".

López Miras, por su parte, culpó a los socialistas de dar alas a los populismos por "su corrupción y la crisis institucional". A su juicio, "cuando hay desafección hacia los representantes políticos, cada vez son más los que eligen opciones políticas que, como Vox hoy o en su momento Podemos, propugnan soluciones fuera del sistema". No obstante, considera que "se trata de un error: el sistema no es el problema, sino los que dirigen el sistema", afirmó, agregando: "Fuera del sistema democrático, no hay orden ni libertad, ni tampoco esa seguridad que muchos predican: solo hay caos”.