MURCIA (EFE). Ecologistas en Acción ha presentado alegaciones formales contra el avance del Plan Parcial ZP-Pn4-2, impulsado en la pedanía de El Puntal, en Murcia, por considerar que pone en peligro el patrimonio natural y la seguridad de las personas.

El colectivo denuncia que el proyecto plantea urbanizar áreas catalogadas como zona de flujo preferente (ZFP) y área inundable para un periodo de retorno de 500 años (T500), lo que califican como una decisión irresponsable.

El expediente del plan reconoce que los terrenos están sujetos a avenidas de agua durante episodios torrenciales, y aun así propone la construcción de oficinas, centros comerciales y otras instalaciones económicas en estas áreas vulnerables.

Según Ecologistas en Acción, el proyecto ignora los riesgos agravados por el Cambio Climático, que incrementa la frecuencia y virulencia de las lluvias torrenciales en la región.

Además de los riesgos físicos, el plan parcial comprometería el modelo de ciudad sostenible y los compromisos medioambientales del municipio.

Ecologistas en Acción critica la intención de convertir una senda verde protegida, contemplada en el Plan General de Ordenación Municipal (PGMO), en una acera con carril bici segregado, sin cumplir con la aprobación previa del Plan Especial de Sendas Verdes, pendiente desde 2001.

La organización subraya que una senda verde no debe reducirse a un carril bici, ya que su función es garantizar la conexión ecológica, proteger la biodiversidad y ofrecer espacios naturales para el disfrute de los ciudadanos. "Sustituirlo por una franja de asfalto y losas es degradar el sistema general verde del municipio", alertan.

Ecologistas en Acción recuerda que estas infraestructuras verdes forman parte de la Red Básica de Murcia y que su modificación requiere una evaluación ambiental completa y la reforma del planeamiento general. "No se trata de una cuestión estética; está en juego el modelo de ciudad que queremos construir", señalan.

La organización ecologista insta al Ayuntamiento de Murcia a rechazar el proyecto por violar principios fundamentales de planificación territorial y por su impacto negativo en las zonas verdes y las áreas de riesgo natural. Piden que se priorice el interés general y la protección del entorno frente a las presiones de promotores privados.

"No podemos seguir construyendo en zonas vulnerables ni permitir que intereses privados se impongan sobre la legalidad ambiental y el bienestar colectivo", concluyen desde Ecologistas en Acción.