VALÈNCIA. 

La Universidad de Murcia expone una muestra del artista Javier Rojo

Las obras podrán visitarse hasta el 18 de noviembre en la Sala Nicolás Almansa del Museo de la Universidad

La Universidad de Murcia inaugura este jueves, 21 de octubre, la exposición ‘La imagen velada’ de Javier Rojo, que tendrá lugar en la sala José Nicolás Almansa del Museo de la Universidad a las 20 horas.

La obra de Javier Rojo se acerca a la pintura vitalista Zen, según la cual el artista debe estar en la pintura, en su gozo, con sus sugerencias, en su fluido, en el instante del mismo movimiento.

Sus pinturas no incurren en la mímesis de un mundo real, ni en el ilusionismo ornamental del impresionismo. Su visión abstracta crea una nueva visión del objeto, da a conocer un aspecto de la realidad no mensurable, creación que tan pronto se alza como desaparece y se insinúa. Asistimos, pues, a un conflicto entre lo racional y lo intuitivo, que al mismo tiempo se compaginan y convergen con lo espiritual y lo místico a través del vacío.

La muestra podrá visitarse hasta el 18 de noviembre de lunes a viernes, de 11 a 14 y de 18 a 20.30 horas.

El artista segoviano Javier Rojo, afincado en Alicante desde hace más de una década, inaugura en el MUA, la exposición “La imagen velada”, una muestra  que recoge una veintena de sus trabajos más recientes en pinturas de gran formato. El acto inaugural tendrá lugar mañana jueves 29 de octubre a las 19 horas, en la Sala el Cool del MUA, y permanecerá abierta al público hasta el 29 de noviembre.

El recorrido expositivo se dispone, por voluntad del artista, con las obras apoyadas en el suelo sobre tacos de madera. Javier Rojo explica que, con esta puesta en escena, quiere hacer un guiño al espectador y acercarlo a la forma en que vería las obras si visitara su estudio. La producción de Javier Rojo se caracteriza por una gestualidad en la que, a través del color y lo matérico, genera superficies sugerentes en las que resuenan algunos de los postulados del expresionismo abstracto. Su pulsión creativa, mezcla de espontaneidad, dominio técnico y azar controlado y consciente, le lleva a una investigación constante, en la que la pintura se convierte en un modo de vida y en una manera de mirar y estar en el mundo.

Con el título de “La imagen velada” Javier Rojo alude a la evocación. La veladura no muestra, insinúa, y en esa insinuación irrumpe el papel del público, que no puede quedar como sujeto pasivo, sino como protagonista en el significado final de la obra, único y personal para cada visitante. El artista, mediante sus cuadros, propone una experiencia de contemplación, un juego de artificio, una suerte de trampantojo o pareidolia entre lo que el ojo ve y lo que el cerebro interpreta. Las pinturas de Javier Rojo no son representaciones de la realidad, o sí: atmósferas, génesis de paisajes, ensoñaciones, horizontes, albores… En definitiva, búsquedas, indagaciones, sorpresas, encuentros y hallazgos que surgen en la intersección entre la creación del autor y la mirada del espectador.