VALÈNCIA.
Los cánones estéticos japoneses marcan el punto de partida en este ejercicio de síntesis formal. Se simplifican las líneas que componen los volúmenes del producto para dar lugar a un diseño muy directo y estructurado, en el que la forma queda fuertemente definida por la propia función de la silla.
El asiento elevado aporta ligereza al producto, y permite ver como el producto ha sido construido. La suave curvatura del respaldo contrasta con el asiento de líneas rectas. Este mismo comparte grosor con las patas, convirtiéndose en trazos que dibujan la pieza de forma contundente, que se acentúa en la versión sin tapizado. La versión tapizada arropa el diseño y le da un enfoque más cálido.
Flexibilidad técnica y productiva para ser mejores.
Controlar todo el proceso productivo nos permite ser flexibles y adaptarnos a las circunstancias y a las necesidades que cada proyecto exige. Para ello, todos los departamentos trabajan conjuntamente formando un gran engranaje humano.
Todo el equipo que forma parte de TM trabaja con pasión y nuestros productos llevan un pedacito de cada uno de nosotros, porque los diseñamos y producimos pensando en las personas.
Nuestros productos pasan por altos controles de calidad y cada departamento revisa hasta el último detalle para que cada modelo responda al diseño y la calidad que exigen los proyectos funcionales y decorativos a los que va dirigido.
Cultura.
Cuidar el diseño, respetando la funcionalidad del producto.
Nuestros diseñadores se dedican en cuerpo y alma a descubrir nuevas formas y rediseñar productos, con estilo, funcionalidad y versatilidad.
01
Mantener la calidad, controlando todo el proceso de fabricación.
El uso de materiales nobles y el control de todo el proceso de producción nos permite mantener unos altos niveles de calidad.
02
Avanzar en tecnología, invirtiendo en innovación y desarrollo.
La investigación en nuevos materiales, elementos y soluciones nos ayuda a desarrollar la tecnología más avanzada en el sector.