MADRID (EP). El Gobierno ha reclamado formalmente este viernes a Israel, mediante una nota verbal, que revierta su decisión de prohibir los contactos con los palestinos por parte del Consulado General en Jerusalén, que entra en vigor este sábado.
Así lo ha anunciado el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press.
El titular de Exteriores israelí, Israel Katz, ha dado instrucciones para que el Consulado en Jerusalén no preste "servicio a residentes en la Autoridad Palestina ni llevará a cabo funciones consulares o de otro tipo fuera del distrito de Jerusalén, sin consentimiento previo por escrito del Ministerio".
La medida se adoptó en respuesta al reconocimiento del Estado palestino por parte del Gobierno y también a las declaraciones de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, sosteniendo que "Palestina será libre, del río hasta el mar", que fueron consideradas "antisemitas" por parte de Israel.
"Hemos trasladado una nota verbal al Gobierno israelí en la cual rechazamos cualquier cortapisa a la actividad normal del Consulado General de España en Jerusalén, porque tiene un estatuto que está garantizado por el Derecho Internacional y por la Convención de Viena", ha explicado.
Ese estatuto, ha añadido el ministro, "no se puede cambiar unilateralmente por parte de Israel" sino que lo que existe es una "reciprocidad" en las garantías, privilegios e inmunidades entre representaciones diplomáticas, de ahí el que el Gobierno haya rechazado "de plano" la decisión y haya pedido que "se revierta".