MURCIA. Hubo un pintor murciano que causó sensación en el mercardo del arte internacional del siglo pasado, tanto que cuentan que los cuadros de sus exposiciones en Estados Unidos se vendían incluso antes de inaugurarse debido a la altísima demanda entre coleccionistas privados. De hecho, sus obras están presentes en importantes colecciones europeas y americanas, desde la Colección Guggenheim a la Thyssen, y fueron adquiridas por personalidades como los Duques de Windsor, Henry Ford, Brooke Astor, Ava Gadner, Luchino Visconti, Salvador Dalí, Luis Escobar o Juan y Bartolomé March. Sin embargo, quien logró todos estos logros, Vicente Viudes (Murcia,1916-Marbella,1984), sigue siendo un gran desconocido para muchos en su tierra, ya que su éxito, precisamente, provocó que sus cuadros se dispersaran fueran de España.

Por eso es de agradecer -y mucho- que se haya organizado una exposición como la que Fundación Cajamurcia muestra en el Centro Cultural Las Claras hasta el 25 de enero, bajo el título Vicente Viudes. Alma de color, en la que se ha reunido una selección de 41 obras procedentes de colecciones particulares europeas y americanas, dando la posibilidad a los murcianos de reecontrarse con el maravilloso mundo, lleno de poesía y magia, creado por uno de los artistas murcianos con mayor proyección internacional del siglo XX, especialmente en los Estados Unidos, donde disfrutó de un reconocimiento extraordinario desde que firmase en 1960 un contrato de exclusividad con las prestigiosas Wally Findlay Galleries de Nueva York, Chicago y Palm Beach, fenómeno que lo catapultó al estrellato en el mercado americano.

Así lo señala el comisario de la exposición, el galerista Darío Vigueras Marín-Baldo, una de las voces más autorizadas de la Región en arte murciano del siglo XX (además de en otras muchas cuestiones), quien se refiere a Vicente Viudes, pintor, figurinista y escenógrafo, como un hombre culto con exquisita sensibilidad y vocación estética, artista versátil y cosmopolita.

La obra de este pintor internacional al que hay que reivindicar 'en casa' ha llenado el espacio expositivo de Las Claras de una 'pintura feliz', que apacigua el alma con los colores y los motivos que llevaba en su adn murciano, como se aprecia en esos cuadros donde no faltan los limones o las hortalizas de la huerta. También está presente la huella que dejó en él su estancia en el Caribe -Santo Domingo y Haití-, donde descubrió la luz tropical y la exuberancia de la naturaleza como hiciera antes que él Gauguin. Son cuadros los de Vicente Viudes en los que a uno no le importaría quedarse a vivir, porque transmiten la paz de habitar en un entorno idilico y contemplativo, donde casi se puede escuchar el ronroneo de los gatos.

Al respecto, dice Darío Vigueras que Vicente Viudes creó un estilo inconfundible marcado por una explosión de colorido exótico y una reinterpretación lúdica, y en algunos casos surrealista, del género del bodegón. Añade, que su obra se caracteriza por los colores vibrantes. Y que en su pintura “el color es composición, son sentimientos, es vida”, configurando un universo alegre y optimista construido con tonos saturados y una estructura compositiva absolutamente precisa,

La muestra supone un hito en la recuperación regional de la figura de Vicente Viudes, permitiendo reencontrar en Murcia la obra de un artista cuya producción viajó principalmente al extranjero. A este respecto, el presidente de la Fundación Cajamurcia, Carlos Egea, subraya que “recuperar la memoria de nuestros creadores es también una forma de rescatar la historia y el legado artístico de la Región. Son muchos los creadores murcianos que, por razones a veces fortuitas, alcanzaron un notable reconocimiento fuera de nuestras fronteras, mientras su nombre se ha ido quedando injustamente relegado en el recuerdo de su propia tierra”. Para tratar de enmendarlo, esta exposición “pretende poner en valor y rendir homenaje a uno de esos talentos singulares que llevó con orgullo el nombre de Murcia a galerías y escenarios de todo el mundo”, reitera Egea.

Según informa Fundación Cajamurcia, la selección de obras expuestas en Alma de color están presentes los géneros y temas recurrentes en la pintura de Viudes: bodegones (de flores, hortalizas…), cuadros protagonizados por animales y aves -a menudo en jaulas- y paisajes que rozan el realismo mágico al estar impregnados de un colorido, una pureza y un clima poético de gran belleza. "Son temas agradables y sencillos, como escenas de la vida cotidiana, invernaderos, jardines interiores, composiciones florales y frutales, bodegones donde los animales, en algunos casos exóticos, se entremezclan con la naturaleza muerta, compiten por la fruta o simplemente se vigilan”, puntualiza Darío Vigueras, quien añade que “sus lienzos vibran con una vitalidad contagiosa”.

Viudes también destacó por sus originales retratos, una fusión entre lo humano y lo vegetal, con figuras formadas con frutas y verduras, motivo por el que fue conocido como el 'Arcimboldo español'.

El pintor que parecía mojar sus pinceles en el Mar Menor

Desde niño, Viudes mostró una vocación decidida por el dibujo y la pintura. Fue becado en el Real Colegio de Alfonso XII en El Escorial, donde el pintor y restaurador Gabriel Palencia se convirtió en su maestro, introduciéndolo en las técnicas de restauración y en un aprendizaje meticuloso “al viejo estilo de aprendiz”, según indica su hermana María Dolores Viudes, quien recuerda que desde pequeño dibujaba sin descanso. "Cuando venía de vacaciones a Murcia se llenaba de la luz y los colores que siempre llevó con él fuera donde fuera. Como decía un crítico de los años 50, parecía que mojara sus pinceles en el Mar Menor”.

Su formación continuó en Murcia, en la escuela del Malecón con el pintor Joaquín, junto a Sofía Morales o Antonio Garrigós, entre otros artistas, y posteriormente en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Tras la Guerra Civil, inició una intensa etapa como figurinista y escenógrafo en teatros como el María Guerrero o el Español, trabajando con Luis Escobar, Luca de Tena, José Luis Alonso o José Tamayo; experiencia que enriqueció su sentido del espacio y la teatralidad pictórica.

Cabe recordar que la última referencia de una muestra dedicada en la Región a Vicente Viudes se remonta al 2017, cuando el Museo de Bellas Artes (Mubam) le rindió homenaje por el centenario de su nacimiento. Ya entonces señalaban los responsables de la antológica que "de los artistas nacidos en Murcia, quizás sea el más desconocido para los murcianos y quizás también el más importante en el ámbito del arte internacional". No se olvidaron de él en la doble exposición Un Ciclo Pictórico Regional 1930-2000 que tuvo lugar en Murcia en 2024 y también estuvo representado en la muestra 14 pintores murcianos para un nuevo siglo de la Universidad Popular de Mazarrón.