El pequeño Rincón de Sumiedo, perteneciente a la diputación de Tallante está de preparativos para aquello que transforma la vida de sus habitantes durante unos días en este cálido verano. Y es que del 25 al 27 de julio, este espacio único en el oeste de la orografía cartagenera se transforma en un escenario de emociones, recuerdos y risas . Vuelven las fiestas patronales en honor a Santiago Apóstol, y lo hacen como se vivía antes en los pueblos y no tan pueblos: con misa, procesión, música en vivo, bocadillos gigantes y hasta huevos fritos con jamón serrano para todo el pueblo. Literal.

La programación, organizada con mimo por la Asociación de Vecinos y la Junta Vecinal Municipal de Perín, tiene algo especial: no solo celebra a un patrón, sino también el alma comunitaria de un lugar donde todos se conocen, todos se saludan y, por unos días, todos vuelven a ser niños.

Viernes 25: entre la fe y el baile

La jornada arranca temprano, a las 9 de la mañana, con el tradicional “alegre despertar rinconero”. No hay mejor forma de decir: ¡Ya estamos en fiestas!.

Por la tarde, el recogimiento y la devoción toman el relevo con la Santa Misa en honor a Santiago Apóstol a las 20:00 h, seguida de la procesión por las calles del pueblo, donde no faltará la banda de cornetas y tambores que acompaña el paso del santo con solemnidad y cariño.

Y cuando cae la noche, llega el momento de soltar el cuerpo y sonreír: a las 22:30 h, el gran baile con Pedro Hernández pondrá ritmo al aire. Y entre canción y canción, bocadillos gigantes para todos, cortesía de la asociación, junto a la ya clásica rifa familiar y el sorteo del socio que esté al corriente de pago. Cosas de pueblo, cosas que nos hacen sonreír.

 Sábado 26: raíces, recetas y recuerdos

El sábado promete ser una noche de emociones y sabores.

A las 22:00 h, el evento “Historias compartidas” nos propone un viaje íntimo al pasado del Rincón de Sumiedo y El Cañar. Una proyección fotográfica retrospectiva acompañada de un coloquio con vecinos y vecinas de toda la vida -sí, habrá sorpresas- que abrirán su corazón para contarnos cómo era el pueblo, cómo se vivía, qué se soñaba.

Después, a eso de las 23:15 h, llega el turno del paladar con el I Concurso de postres tradicionales. Magdalenas, paparajotes, flanes caseros… quién sabe con qué delicia nos sorprenderán los participantes.

Y como si fuera poco, a las once y media de la noche, el dúo musical Géminis Show pondrá música a una noche que promete ser inolvidable. Entre canción y canción, la ya mítica “sartenada de pueblo”: huevos fritos en aceite de oliva, jamón, patatas y ajos tiernos, cocinados con todo el amor del mundo. Y, por supuesto, nueva rifa familiar y sorteo del socio.

Domingo 27: cine al aire libre, palomitas y un olivo que emociona

El broche final llegará el domingo a las 22:00 h, con una propuesta sencilla pero poderosa: cine bajo las estrellas. Se proyectará la película El Olivo, una historia que habla de raíces, memoria y arraigo, como la que tienen los vecinos del Rincón de Sumiedo, perfecta para cerrar un fin de semana lleno de alma.

¿El lugar? La plaza de la ermita de Santiago, un enclave mágico. ¿El acompañamiento? Palomitas para todos, cortesía de la asociación. Una fiesta pequeña con un corazón enorme

No es una feria multitudinaria ni falta que hace. Las fiestas del Rincón de Sumiedo tienen lo que de verdad importa: comunidad, tradición y alegría sincera. Es ese tipo de celebración donde el tiempo se detiene, el santo vuelve a salir a la calle, y los vecinos se miran a los ojos con una complicidad que no se compra, se cultiva.