Hace cuatro años, Katarzyna Rogowicz -la artista polaca que ha echado raíces en Murcia, donde vive desde hace tres década- encontró en la playa unas boyas que había escupido el mar. “Supe entonces que las necesitaba, aunque no sabía aún para qué”, señala. Esos artefactos, que ha pintado junto a su hija, ahora dan la bienvenida a la exposición que, bajo el título Amor, ha inaugurado en la Cárcel Vieja de Murcia, donde hasta el 26 de abril reinará el mundo de fantasía, magia, imaginación, cuentos y color que ha creado esta artista durante los últimos 25 años. Porque Amor reúne un centenar de obras realizadas por Katarzyna Rogowicz desde el año 2000, durante todos sus años de maternidad –siendo, por lo tanto, un proyecto vivo e inconcluso-, que incluye ilustración, pintura, diseño al textil, escultura e instalaciones. Algunas de las piezas proceden de colecciones privadas y hay otras que han sido cedidas por los colegios de Fuente Álamo con los que trabajó la artista.
La pieza Mujer boya, que pone un punto de color al patio de entrada de la Cárcel Vieja, representa una reflexión sobre la maternidad, que es el punto de partida de la muestra. “Para mí la maternidad, al principio, era como estar en la orilla y contemplarla como un mar sin horizonte, sin fin, plano, lleno de brillos y azul, pero también furioso y turbio en ocasiones. Esas boyas se presentan como un posible auxilio frente a las dudas, una ayuda para mantenerse a flote. Vinieron a mí para que después de 25 años las pudiese convertir en otra cosa”, apunta. Señalando, además, que el hecho de pintarlas con su hija supuso “un momento de reencuentro, que estuviéremos las dos como cuando era pequeña”.
Y así, Katarzyna Rogowicz invita a pasar a su mundo mágico, fruto de cómo la artista polaca ha afrontado “la maternidad a través de arte y el arte a través de la maternidad”, durante un camino en el que su vida, prioridades e inquietudes iban cambiando. Para mostrar ese recorrido, “hemos jugado con el espacio, con las instalaciones y diviendo las obras en cuatro partes”, explica. Así, hay una parte inicial que representa “la época más primeriza, donde yo gestiono el tema del embarazo, de esa búsqueda y de ese viaje imaginario que iba a emprender con mi hija”. La artista se inspira “en los cuentos de toda la vida, como Caperucita Roja, donde el lobo es la loba, la madre que acompaña”. También muestra vestidos confeccionados por ella misma, con títulos como Ama de casa o Lactancia materna.
- Exposición de Katarzyna Rogowicz en la Cárcel Vieja -
- Foto: C.F.P.
En otro espacio, ubicado en la primera planta, Katarzyna Rogowicz ha reunido, en colaboración con el Ayuntamiento y el Museo de Fuente Álamo, trabajos que pintó con los niños de numerosos colegios durante una serie de talleres que se desarrollaron en la localidad en el año 2007. “Es otra faceta mía, ya que a raíz de tener a mi hija empiezo a trabajar con los niños”, comenta.
El tema de la adolescencia se aborda en otra sala con obras inspiradas en Alicia en el País de las Maravillas, “donde muestro ese cambio tremendo que sufren las niñas cuando empiezan a menstruar y su cuerpo cambia”. Se trata de una zona instalativa en la que la artista invita a los visitantes a reflexionar sobre su infancia y adolescencia, así como sobre la rigidez de la enseñanza en los colegios.
Katarzyna también muestra con Amor parte de sus trabajos que tienen que ver con el diseño gráfico, las ilustración, la publicidad y el mundo editorial, siendo este último muy importante en su trayectoria profesional al haber ilustrado maravillosos cuentos como Los retratos de Renato, Los colores de Mateo, Garabatos, Malapata¡Astronauta!, Perezoso. Alias Pérez, entre otros muchos.
- Exposición de Katarzyna Rogowicz en la Cárcel Vieja -
- Foto: C.F.P.
Los visitantes a esta exposición, que ha sido comisariada por Juan García Sandoval y el arquitecto Ramón Garriguez, le comentaban a la artista durante la inauguración que se habían sentido como dentro de libro lleno de historias fantásticas. Es por ello, que la artista remarca que se trata de una muestra que está dirigida a toda la familia, tanto a los más pequeños, que disfrutarán con el universo de colores y personajes creados por la autora, como a los adultos, que además podrán reflexionar sobre las ideas que han originado estas obras.
Sobre Katarzyna Rogowicz señalan los comisarios que "es una creadora multidisciplinar que se inscribe en una corriente en torno al uso del lenguaje para la (re)construcción de la memoria e identidad. En sus creaciones compone historias, personajes y lugares donde cobijarse, y participa del arte como proceso y herramienta de transformación personal y social. Artista que une arte y vida, su quehacer artístico le permite realizar proyectos personales o colaborativos con instituciones públicas y privadas".
“Esta capacidad de búsqueda crea unas idas y venidas recurrentes en su obra; pasa de la ilustración a la pintura o la escultura, de lo objetual a lo conceptual, con temáticas como el apego, la mala y buena madre, la soledad, la migración, la falta de libertad, la mujer (ayer, hoy y en el futuro). Cuestiones que han ido revelándose a lo largo del camino de sus quehaceres artísticos que se van adquiriendo en las diferentes etapas de la vida, y se impregnan sobre la idea del amor y la construcción de la felicidad”, añaden.
Por cierto, las originales cartelas de las obras de esta exposición están escritas a lápiz en la propia pared,incluyendo bocetos, como si de una libreta se tratase.
