Victorias aterriza en Murcia con nuevo disco bajo el brazo. La banda sevilla afirma que con Emocional, su segundo disco, es el mejor de sus vidas. "Siempre hemos hecho las cosas a nuestra manera. Le hemos cantado al amor, a nuestra ciudad, a dejar la banda e incluso a trabajar en una heladería. Hemos sido tres, luego cuatro, luego cinco y de nuevo cuatro. Nos hemos hecho más fuertes cuando más difícil estaba. Hemos versionado a Pancho Céspedes y también a Peso Pluma", afirma describiendo de alguna forma el difícil recorrido que tiene cualquier banda que quiere, ya no vivir de la música, sino tener la posibilidad de seguir tocando. Antes de su parada en Murcia, atiende a Murcia Plaza su bajista, Christian, que ha pasado de la guitarra al bajo. "Todo un ascenso".

¿Cómo os encontráis? Gira hasta mayo, luego más gira…

Pues estamos al borde del colapso, a punto de desfallecer… (risas). No, es broma. Muy bien, deseando estrenar el disco. Deseando de mostrarlo en directo y disfrutar. Ahora llega el momento de disfrutar.

¿Cuántos días vas a estar sin pasar por casa en los próximos meses?

No tengo ni idea. Con mi trabajo ya viajo mucho y ahora con la banda ya ni te cuento. Mi novia vive también fuera de Sevilla…Es casi inviable pagar el alquiler. Me saldría más barato dormir en hoteles en vez de tener una casa alquilada.

Además de la banda, ¿en qué trabajas?

Tengo un cocktail bar en Sevilla, Naked and Famous, muy chulo y hacemos muchas demostraciones de cocktails a otros bares de España, al extranjero, ferias…Bueno, sin parar.

Volviendo al grupo, es curioso que cuando empiezas a escuchar la canción te vienen parecidos con otras bandas, pero conforme avanza el tema no sabes donde encajar el estilo. ¿Esto es natural o intencionado?

Muchas veces es que no sabemos donde encasillarnos. No sabría que decirte. No es que no queremos encasillarnos, es que no sabemos.

Sois Ire, Juanma, Rafa y tú los componentes de la banda. ¿Cómo llegas a formar parte del grupo?

La banda venía de una antigua formación que graba el primer disco. Con el segundo disco, el cambio es tan grande respecto al primero, al grabar con Guille Mostaza como productor, y entrar yo también en el grupo, que se decide incluso cambiar el nombre de la banda a Victorias.

Yo de inicio los conocía a través de una discográfica en otro grupo en el que estaba. Ellos me conocían también, después cuando me mudo a Sevilla los conozco más y yo empiezo con ellos, una vez que han grabado el primer disco, empiezo tocando la guitarra. Ahora soy bajista, que siempre lo vi como una degradación (que no se enfade nadie).

Sin embargo, me he dado cuenta, aunque ya lo sabía, de lo importante que es el bajo. Hasta que no lo tocas, no sabes lo importante que es el bajo. Es mucha dependencia. Cuando tocas la guitarra, es importante, pero si desafinas o pasa algo no se descuadra todo. Cuando toco el bajo acabo reventado y, si me paro por lo que sea, el que está escuchando se pregunta si ha pasado algo. Es muy importante.

Leí hace poco una comparativa sobre la dificultad de los instrumentos y comparaban una batería, una guitarra, un bajo y una armónica. En la iniciación, el bajo era el más fácil y la batería el más complicado. A la hora de evolucionar, el bajo terminaba siendo el más difícil de tocar y la batería el más fácil. El bajista no es el que menos liga (risas).

Dar muchos conciertos es la tendencia porque es la forma de generar más ingresos. ¿Esto es algo bueno para las bandas?

Si te digo todos los gastos que conlleva irte de gira, no es rentable para nada (risas). Sobre todo, en niveles tan humildes como los nuestros. Es todo una forma de promoción y una inversión. Aparte, es una forma de vivir. Si no nos gustara, esto lo hubiéramos dejado hace mucho tiempo. La música es un problema continuo, muy bonito, pero un problema constante. Familia, amigos, trabajo…Compromete todo. Está muy bien para los ratos libres, pero es que ya no son ratos libres, demanda mucho tiempo. A nivel global, no interesa. Emocionalmente, por supuesto.

¿Estáis todos implicados en la composición?

El tema lírico lo lleva más Ire (voz). Nosotros le echamos una mano, tira mucho de nosotros para terminar de componer. Cada uno aportamos su parte de cada instrumento.

¿Qué evolución observas de la banda de Un puño amable a Emocional?

Es muy grande el cambio que ha habido. A raíz de profesionalizarnos, cuando empiezas a salir en festivales…Esto es otro mundo. Emocional es una evolución musical y de sentimientos muy grande. Hemos aprendido a exponernos más y a mostrarnos como somos. Nos ha dado confianza en nosotros mismos.

¿Qué escuchas en tu tiempo libre? ¿De dónde viene tu inspiración musical?

Es curioso porque en la banda somos una mezcla de gustos musicales. Va de Nino Bravo a King of Lion, Wilcor… A Ire (solista) le dio una fiebre de Pearl Jam.