El barco de investigación oceanográfica Hespérides seguirá confiando en manos de Navantia. La empresa pública ya trabaja en un contrato valorado en 2,1 millones de euros para encargarse del mantenimiento de sus motores.
El acuerdo no es aislado. Forma parte de un marco más amplio que la Armada puso en marcha para asegurar el buen estado de sus buques. En esta ocasión, la gestión recayó en la Intendencia de Cartagena, que optó por un procedimiento negociado y directo.
La adjudicación se cerró este pasado lunes, tras publicarse unos días antes en la plataforma oficial. La formalización ya es un hecho. Con ello, el Hespérides, pieza clave en campañas científicas y misiones en aguas lejanas, contará con el respaldo técnico necesario para afrontar sus próximos compromisos.
Se trata de una inversión estatal destinada a garantizar que un buque estratégico siga en activo sin contratiempos. En definitiva, un movimiento que consolida a Navantia como socio indispensable de la Armada y que asegura, al menos por ahora, que la maquinaria del Hespérides continúe funcionando en perfectas condiciones.
El buque zarpará de Cartagena a finales de noviembre de 2025, comenzando su misión en la Antártida en diciembre y concluyendo a finales de marzo de 2026. La misión, como cada año, incluye la realización de cinco proyectos de investigación científica y el apoyo logístico a las bases antárticas españolas.