El Intendente de Cartagena de la Armada ha lanzado una licitación por 304.330,95 euros para realizar mejoras en el sistema de carga de baterías de los submarinos S-80, centradas en aumentar la eficiencia y seguridad de los equipos.
El proyecto surge tras las pruebas realizadas con el submarino S-81, que detectaron diferencias de tensión de 10-12 voltios entre la salida de los rectificadores y las bornas de las baterías, debido a la longitud de los cables de la instalación. Para solucionarlo, se instalarán medidores de tensión que permitirán conocer en tiempo real la energía en las bornas y ajustar la carga de manera precisa.
Además, los rectificadores generan gran cantidad de calor durante su funcionamiento, lo que puede afectar al rendimiento de los equipos. Por ello, se instalará un sistema de extracción y climatización para los cinco armarios que albergan estos aparatos, garantizando que el aire caliente se evacúe y los equipos funcionen de manera óptima.
El edificio del Taller de Baterías, donde se realizarán las obras, es histórico: data de mediados del siglo XVIII y formó parte del Arsenal de Cartagena, sede de talleres de carpintería, herrería y construcción de navíos. A lo largo de los años ha sido adaptado para distintos usos, y hoy alberga la Base y Escuela de Submarinos, combinando instalaciones industriales, residenciales y administrativas.
Entre las mejoras contempladas se incluyen:
- Lectura de tensión de baterías: se instalarán dos armarios de medida en los muelles central y norte para controlar las tensiones reales de carga de los submarinos.
- Traslado del sistema de monitorización: el control se centralizará en la sala de control del taller mediante una pantalla HMI de 15 pulgadas, que permitirá supervisar y manejar los rectificadores.
- Cambio a modo Back-up: los rectificadores dejarán de funcionar en paralelo y se adaptarán para que uno actúe como maestro y el otro como respaldo automático en caso de fallo.
- Sistema de refrigeración: se instalarán conductos y extractores para evacuar el aire caliente al exterior, además de unidades de climatización para mantener los armarios a temperatura adecuada.
Con estas mejoras, la Armada busca optimizar la carga de las baterías, proteger los equipos y garantizar la eficiencia operativa de los submarinos S-80, reforzando al mismo tiempo un edificio histórico de gran valor patrimonial.