En noviembre de 2023, hace ahora algo más de dos años, el Partido Popular (10 concejales) y Vox (cuatro concejales) llegaron a un pacto para la gobernabilidad de Cartagena en el periodo 2023-2027. Para constatarlo rubricaron un acuerdo con 70 puntos, al que denominaron “comprometidos por Cartagena”.

Es a ese pacto al que se ciñen unos y otros cuando se les pregunta por los motivos por los que los Presupuestos de 2026 no están cerrados todavía. Afirman concejales de ambas formaciones que esos 70 puntos son los que rigen su hoja de ruta y que no hay otras excusas ni rumores que hayan modificado sus planes para que las cuentas del próximo año estén prácticamente listas.

A pesar de las reiteradas preguntas de los medios, ni PP ni Vox han concretado cuándo estarán listos los presupuestos, que, según ha podido saber este diario, serán continuistas, sin grandes cambios respecto a años anteriores. Fuentes consultadas confirman que se aprobarán entre la última semana de diciembre y la primera de enero.

Hace un par de semanas, Noelia Arroyo insistía en que sacar adelante las cuentas municipales es esencial para garantizar la continuidad del proyecto político de esta legislatura. Según explicó, el equipo de gobierno mantiene como objetivo el cumplimiento íntegro del programa pactado, del que ya se ha ejecutado aproximadamente un 60%, con otro 30% en marcha y un 10% pendiente.

Recordó además que este año el Ayuntamiento aprobó diversas medidas destinadas a aliviar la carga de familias y autónomos y a estimular la inversión. Entre ellas citó la congelación del IBI, los incentivos a la creación de empleo, la tasa cero para nuevos negocios y la gratuidad de las escuelas infantiles, medidas que el gobierno local considera esenciales para impulsar la economía y reforzar su política social.

El ejecutivo municipal adelantó en julio la tramitación de las ordenanzas fiscales y, desde entonces, todas las concejalías han trabajado con Hacienda para ajustar su previsión de gasto a los compromisos del programa de gobierno. Cada área ha elaborado ya un borrador presupuestario, y con las últimas instrucciones de Alcaldía se están ultimando los detalles del proyecto final. La intención es elevarlo a la Junta de Gobierno Local en las próximas semanas, junto con las cuentas de los organismos municipales, para remitirlo después al Pleno y debatirlo en diciembre.

Arroyo también advirtió de las dificultades que afrontan los ayuntamientos cuando deben elaborar sus cuentas sin conocer todavía los Presupuestos Generales del Estado. La ausencia de esa referencia, señaló, genera incertidumbre sobre las transferencias estatales, complica la previsión de ingresos y condiciona el ajuste del gasto para cumplir con la Ley de Estabilidad Presupuestaria.