El Ayuntamiento de Cartagena y los principales productores y promotores de los festivales que se celebran en la ciudad estudian la posibilidad de contar con una ubicación estable y permanente para la diversa oferta musical, especialmente durante los meses de verano. Solo para los eventos musicales previstos este verano, las estimaciones apuntan a 200.000 visitantes que acudirán a un nutrido calendario de conciertos.

Así lo confirmaba la propia alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, quien explicaba que muchos promotores “tienen ahora mismo la capacidad para programar y lo están haciendo en otras ciudades de España, de forma más periódica y permanente. Y quieren establecer un calendario junto con la Concejalía. No es algo fácil, ni que se pueda hacer de forma inminente, pero sí es la evolución y la transformación a la que vamos: aprovechar todos los espacios que tenemos, tanto infraestructuras como El Batel, el auditorio Paco Martín del Parque Torres, el futuro Teatro Circo, el futuro Cine Central, como los espacios abiertos que estamos usando a día de hoy”.

Arroyo añadía que existen algunos espacios que han funcionado muy bien, como es la Cuesta del Batel, que habría que reservar para los principales eventos con aforos de 15.000 o 20.000 personas. “Pero hay otros espacios de la ciudad que estamos analizando, propuestos por los promotores -que son quienes realmente entienden de esto- junto con la Concejalía, para habilitarlos de forma permanente”.

Uno de esos espacios es la fachada marítima, “que nos gusta mucho”, aunque mantienen abiertas todas “las posibilidades. También otros entornos que nos permitan hacerlo en el centro de la ciudad, pero no en el casco histórico. Porque realmente, más allá de la Cuesta del Batel, tenemos poco espacio en el casco histórico. Pero sí: ellos lo han planteado y nosotros estamos dispuestos a hacerlo”, aseguraba Arroyo.

Este verano, cerca de 200.000 personas acudirán a Cartagena para alguno de los eventos musicales programados. “Estamos hablando de festivales como el Rock Imperium o de festivales que se incorporan, como Cartagena Suena, con los dos conciertos de Arde Bogotá, que van a tener un impacto económico muy importante en la ciudad y que van a contribuir a que Cartagena se consolide como un destino turístico y de festivales de primer nivel y máxima calidad”.

Esto se traduce “en empleo y, por supuesto, en economía para la ciudad, apostando por la cultura, por la industria cultural y por los artistas que ahora mismo están en lo más alto, tanto los nuestros -como el grupo Arde Bogotá- como la programación de festivales como el Rock Imperium, con carteles de primer nivel”.

También hay otros promotores que están haciendo mucho por la ciudad y que suman en esta estrategia de Cartagena como destino de festivales, como el Weekend DJ o el Hermosa Fest, “que también se está consolidando dentro de la agenda cultural, o el festival que se organiza con motivo de Carthagineses y Romanos, que en definitiva son citas muy importantes y que nos permiten consolidarnos, insisto, como un destino cultural de festivales y como una industria por la que queremos apostar cada vez con mayor calidad”.

Ante el crecimiento que está experimentando Cartagena y el aumento de visitantes gracias a este producto cultural en formato de festival, la reunión sirvió para analizar qué se debe hacer para evolucionar, transformarse y ofrecer -desde la colaboración público-privada- a los promotores y organizadores “la mayor seguridad, la mayor certidumbre, la mayor estabilidad”.

La alcaldesa recordaba que organizar estos eventos es muy costoso. “Ellos hacen un esfuerzo tremendo, enorme, para que la ciudad tenga una agenda cultural de primer nivel y para que vengan los principales artistas locales e internacionales. Y queremos ver, desde esa colaboración, qué tipo de iniciativas debemos desarrollar desde la Concejalía de Cultura, desde la Oficina de Eventos, con la Dirección General de Cultura, para que no solamente podamos consolidar los festivales que ya se celebran en Cartagena, sino también ver qué debemos hacer para seguir creciendo”.

Medir la rentabilidad que tiene creer en la cultura

“Es una industria por la que apostamos y en la que creemos. Solo, por ejemplo, el Rock Imperium el año pasado supuso una inversión en la ciudad de 15 millones de euros”, apostilló Arroyo. “Pero todos ellos tienen retorno. Y el que no lo tenga porque todavía no lo haya estudiado, lo va a medir junto con el apoyo del Ayuntamiento de Cartagena. Vamos a comprobar efectivamente cuál es la rentabilidad que tiene creer en la cultura, apoyar los festivales e invertir de esta forma en la ciudad. El euro que destina la administración pública -en este caso la administración local- tiene un retorno muy importante”, subrayó la alcaldesa, quien destacó que el Ayuntamiento invierte cerca de 2 millones de euros tanto en el apoyo a los eventos musicales de empresas como en los propios.

“También quiero analizarlo con ellos, porque sin duda la única manera de que permanezcan estos festivales en la ciudad, de consolidarlos dentro de la agenda municipal y de que evolucionen y crezcan, es escuchando las necesidades de todos ellos”.

“Tengo que agradecer mucho el esfuerzo de los directores de los festivales, porque a día de hoy tienen un apoyo del Ayuntamiento que no solamente es económico, sino también logístico, a través de la Concejalía: infraestructuras, seguridad… muy importante. Pero creo que la ciudad todavía les debe mucho, y tenemos que ofrecerles un apoyo mucho más firme y estable que les permita cubrir gastos de todo tipo para que puedan seguir programando”.

Desde el Ayuntamiento, la Concejalía de Cultura, la Oficina de Eventos y la Dirección General de Cultura, se propone canalizar qué tipo de sinergias se pueden establecer con los promotores y qué puede facilitar el Ayuntamiento para que sus festivales sean más sostenibles. “Si queremos estar presentes en las principales ferias de la industria y escaparates del sector, el Ayuntamiento también debe apoyar el esfuerzo que ellos hacen en esos escenarios para promocionar la ciudad y sus eventos. Pero la cifra de cada uno habría que pedírsela a cada promotor, con prudencia y cautela, porque hay quienes apuestan más fuerte un año y al siguiente reducen, para luego volver con un cartel más potente y hacer el festival sostenible. Tienen que gestionarlo así”.

Apuesta por un apoyo “permanente y estable”

El apoyo del Ayuntamiento “pretendemos que sea permanente, estable, y que les permita tener esa seguridad para programar en buenas condiciones para la ciudad. Además, ya sabéis que aquí, en la ciudad, arrancar cualquier cosa cuesta el doble”.

Arrancar Cartagena Suena con Arde Bogotá en dos noches “cuesta, y mucho”. Arrancar como se arrancó el Rock Imperium, que ya va por su cuarta edición, y lograr que sea sostenible, “cuesta, y mucho”. Y con el resto de festivales, igual. “Que crezca el festival de Carthagineses y Romanos como fiesta internacional cuesta. El Hermosa Fest cuesta. Todo cuesta mucho, pero también es verdad que el retorno y el comportamiento de la ciudad merecen la pena”.