El Ayuntamiento de Cartagena ha iniciado en octubre una serie de demoliciones en el barrio de Santa Lucía y Los Mateos, tras las órdenes emitidas por el área de Urbanismo ante el mal estado de varios inmuebles que suponían un riesgo para la seguridad pública.
Se trata de actuaciones de ejecución subsidiaria, es decir, trabajos que realiza el propio Ayuntamiento cuando los propietarios no acatan las órdenes de demolición. En todos los casos, los informes técnicos advertían de la situación de ruina y del peligro de derrumbe parcial o total de las edificaciones.
La empresa Ecotaniz, especializada en obras de demolición y retirada de residuos, ha sido la adjudicataria de todos los contratos, con un importe total que supera los 54.000 euros, IVA incluido.
Varias intervenciones en puntos cercanos
Los primeros derribos se realizaron el 1 de octubre, en la Travesía Isabelona, donde dos construcciones en muy mal estado fueron demolidas. Ambas estaban situadas a escasos metros una de otra, en una zona con viviendas antiguas y solares abandonados.
Ese mismo día se autorizó también la demolición de otro inmueble en el Cabezo de los Moros, en el entorno del barrio pesquero, con un coste de 7.018 euros.
Posteriormente, el 13 de octubre, Urbanismo adjudicó dos nuevas actuaciones: una en el número 16 de la calle Santa Margarita, con un presupuesto de 26.838 euros, y otra en otro punto del Cabezo de los Moros, por 7.744 euros.
Desde el área de Infraestructuras explican que estas demoliciones forman parte del plan de actuaciones puntuales de seguridad en edificios ruinosos de Cartagena, especialmente en barrios antiguos, donde algunas construcciones abandonadas se han convertido en un problema estructural y, en ocasiones, en un riesgo para los vecinos y viandantes.