MURCIA. Fueron clave durante el confinamiento y continúan demostrando su valía día tras día. Las plazas de abastos de Murcia se han convertido en una de las señas de identidad del municipio, que no podría ser reconocido sin lugares tan emblemáticos como el Mercado de Verónicas. Por tanto, y para reconocer la importancia que tienen estos lugares en el plan de futuro de la ciudad, el Ayuntamiento está trabajando en una nueva ordenanza para "modernizar" las plazas de abastos y blindarlas contra la privatización.
Así pues, pasarán a ser reconocidas como "mercados de utilidad pública" y tratados como tal en la legislación, según ha adelantado a Murcia Plaza el concejal de Mercados, Juan Vicente Larrosa: "Queremos dejar claro que el Ayuntamiento va a seguir gestionando este servicio. No se va a privatizar".
En este sentido, ha detallado que el plan del Consistorio para las plazas de abastos es mantenerla como el lugar de aprovisionamiento de suministros básicos que es ahora, por lo que descartan otras opciones como los gastromercados.
No obstante, sí plantean la introducción de otros negocios que pueden ampliar la oferta que existe en estos momentos. En específico, el concejal menciona la posible creación de puestos de "venta de esparto, sastrerías o marroquinerías".
"Queremos dejar claro que el Ayuntamiento va a seguir gestionando este servicio. No se va a privatizar".
En cualquier caso, especifica que "el trabajo que se está haciendo ahora está bien", por lo que más que modificaciones buscan actualizar la ordenanza a la legislación actual. Al fin y al cabo, la ordenanza actual fue aprobada en el año 1996 y aún recoge las sanciones en pesetas, lo que no deja de ser una anécdota ilustrativa del cambio que aquí se plantea: ahora las mismas multas se establecerán en euros desde un principio. En ese sentido, Larrosa indica que busca "adaptar las plazas al siglo XXI".
Por tanto, no se esperan grandes cambios en el funcionamiento diario de estos mercados, que continuarán al servicio de los ciudadanos tal y como llevan haciendo tantos años.
Asimismo, el Ayuntamiento está redactando la norma en colaboración con las asociaciones de plazas de abastos para garantizar su buena acogida entre los comerciantes. De momento, Larrosa adelanta modificaciones en el tiempo de concesión de los títulos, un punto de conflicto con la ordenanza actual.
En cuanto al estado de la tramitación, en estos momentos la Concejalía aún no ha completado el primer borrador de lo que será la futura ordenanza. De hecho, Larrosa aún se encuentra investigando las normas que existen en otros lugares como fuente de inspiración, por lo que se espera un largo trecho hasta que se apruebe definitivamente.
