PHOTOGENIC-SEMINCIMURCIA (EP/EFE). La actriz murciana Marta Nieto debuta como directora de un lacon La mitad de Ana, ópera prima en la que dibuja la búsqueda de la identidad de una madre avasallada por su contexto que logra despertar ante la crisis de su hijo, un niño trans que tendrá que explorar su camino.
Se trata de cómo "una mujer adulta que puede reinventarse y renacer de una nueva forma", ha aseverado la cineasta en una rueda de prensa en el marco de la 69 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), donde estrena en Sección Oficial a concurso su primer largometraje, para el que ha escrito el guión junto a Beatriz Herzog.
Precisamente, Nieto participó en la 67 edición de la Semana con su cortometraje Son, que supuso su debut tras la cámara y que ahora da lugar a esta cinta en la que la actriz se reinventa como directora y autora, a la vez que intérprete, para realizar un retrato sincero de la relación de una madre y un hijo que intentan encontrarse a sí mismos.
La ficción presenta a Ana (Marta Nieto), un madre separada que compagina su trabajo precario como vigilante de sala en el Museo Reina Sofía con el cuidado de Son (Noa Álvarez), su hija de ocho años, cuyo padre, Michel (Nahuel Pérez Biscayart) vive con su nueva pareja en Villajoyosa (Alicante) y trabaja en un bar frente al mar, un lugar donde Son adora estar. "Dirigirse a una misma es lo más difícil", "coordinar dos roles es muy complicado", ha admitido la murciana
En su vuelta a Madrid tras parte del verano con su padre, Son manifiesta su conflicto: se imagina saludando con el mar de fondo, camiseta de tirantes y bañador de chico, y se pregunta por qué ha sido una niña. El niño empieza así una exploración de su identidad de género y se presenta ante su mundo como el chico que desea ser, ante lo que su madre, avasallada por su contexto de madre y artista frustrada, emprende también un viaje interno que le lleva a preguntarse quién es.
En este contexto, La mitad de Ana se centra en la búsqueda de la identidad de una madre que quiere ayudar a su hijo pero necesita, primero, abordar los distintos puntos de vista sobre sí misma y lo que ocurre a su alrededor, lo que se ancla de forma visual a través del cuadro El mundo, de Ángeles Santos Torroella.
Con esta obra y otras, el arte y su distintas perspectivas sirven a Nieto para dibujar esta drama que, con el tema de la maternidad y la infancia trans de fondo, dirige al viaje interno de una mujer fragmentada, lo que se plasma, asimismo, en los reflejos y la distorsión de las imágenes.
En este sentido, Nieto ha destacado que su largometraje de presentación expone como para que uno pueda cambiar el punto de vista sobre algo, "tiene que haber una crisis", en este caso la de Son, su exploración y cómo el entorno reacciona a ello.
La cineasta ha explicado que la cinta ahonda así en el "universo" que supone "esa otra mitad de Ana", que tiene que ver con "lo que ha dejado de hacer después de tener que criar casi en solitario a un niño", lo que se "une" a su "frustración" como artista.
"Mira al entorno desde ese lugar", ha señalado, para incidir en que la situación la obliga a mirar "más allá", a lo que le ayuda el mencionado cuadro, que sirve de "anclaje" para entendere a esta madre que se siente "avasallada y deshecha a veces".
La pieza de grandes dimensiones que cuelga en el Reina Sofía la firma la pintora surrealista Ángeles Santos, ayuda a movilizar a Ana, tal y como ha explicado la directora, quien ha subrayado que también ha elegido esta obra "divertida y mágica" para reivindicar a su autora. Al respecto, ha recordado que este cuadro se terminó en 1929 en Valladolid, donde también se expuso por primera vez.
Por otro lado, Nieto ha incidido en la importancia del lenguaje en el guión de la película al explorar la infancia trans. "Fue una de las cosas donde teníamos que ser más precisas", ha defendido, para clamar por la "inclusión".
En relación con la diversidad en la película, ha reivindicado una "vocación" de "intentar generar poco a poco un imaginario más amplio" y ha aseverado que en la ficción caben "personas de todo tipo".
"La intención de verte reflejado en la pantalla, seas como seas, es parte de lo que tenemos que hacer", ha señalado Nieto, quien también ha confesado que autodirigirse en este filme ha sido "de lo más difícil" que ha hecho "nunca jamás".
