Los regantes quieren sentar a la ministra Ribera en el banquillo 

MURCIA. Los regantes "van a ir por todas" para defender el Trasvase Tajo-Segura y recurrir la decisión del corte de los meses de diciembre y enero, acordada por el Ministerio de Transición Ecológica. Tanto es así que el Sindicato Central de Regantes, el Scrats, ha contratado eabogados especializados en material penal para determinar si hay algún tipo de responsabilidad penal. "Cualquier decisión política ha de ser muy bien estudiada", advirtió Lucas Jiménez , presidente del Scrats, que se reunía este miércoles con el presidente del Gobierno regional en San Esteban. Posteriormente, Jiménez ha comparecido en una rueda de prensa junto con el consejero de Agua y Agricultura, Antonio Luengo, en la que ha defendido que "todavía hay tiempo para rectificar", pero también ha abierto la puerta a la vía penal. "Cualquier decisión política que afecta al sector agrícola que no se tome con exactitud a la ley se puede ver envuelta en una querella". Así se refería sobre la orden de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, de cortar el envío de agua para regar en diciembre y enero bajo el pretexto de no contaminar el Mar Menor.

Frente común del levante

El Ejecutivo regional ya ha presentado el recurso Contencioso-Administrativo por el trasvase cero de diciembre-enero, está preparando el recurso por el corte de noviembre y también trabaja codo con codo con el Gobierno de Andalucía para unificar sendos recursos ante la Justicia. El consejero de Agua ha avanzado que la Región de Murcia "liderará" un frente común del agua del levante con Andalucía y Valencia; para ello ha solicitado una reunión con la consejera homóloga de la Comunidad Valenciana. Además, está previsto que los regantes se reúnan este viernes con el presidente valenciano, Ximo Puig.  "Más allá de sus diferencias políticas, esperemos que todos los gobernantes tengan altura de miras", reclamó Jiménez, "porque afecta a los dos Gobiernos y nos jugamos mucho". 

La semana que viene se vuelve a reunir la Comisión Central de Explotación, en una cita fijada para 14 de enero. Los embalses de cabecera continuarán en nivel 3, lo que exige el permiso del Ministerio. "Estamos preocupados", expresó Jiménez al tiempo que decía que hay tiempo para cambiar de posición. "Fue un error manifiesto del Ministerio; pero se puede volver a la lógica durante este mes autorizando caudales para el regadío". Si eso no pasara y los regantes siguen sin caudales, el presidente de los regantes ha advertido: el sector se movilizará de manera "muy virulenta" porque "significaría que querrían finiquitar el trasvase".

El presidente del Scrats insistió en recalcar la importancia del acueducto, clave incluso para la desalación. "Sin trasvase, no nos vale el agua desalada, porque no hay conducciones suficientes y no podemos pagar todos los costes". Por el momento, la producción de los regantes se mantiene gracias a las reservas de 20 hectómetros cúbicos de agua. Si por el momento no ha disminuido la producción agrícola a pesar de los dos trasvases cero es porque la Región -explicó Jiménez- cuenta con unas reservas de unos 20 hectómetros cúbicos de agua.

Temor del Gobierno regional con Sánchez

Pedro Sánchez ha tomado posesión como presidente y el nuevo Ejecutivo central comienza a andar, pero el consejero Luengo, por su parte, vaticina una legislatura nacional marcada por la incertidumbre. "Hay un precedente importante y muy peligroso", justifica, refiriéndose al corte del travase y también a la decisión de noviembre, en la que también cortó el grifo para regar -aunque no para abastecimiento humano-. "Pusieron dos excusas, como son la precaución y el Mar Menor, en contra del criterio técnico de la Comisión ", señaló-. "No podemos estar pasivos con el Gobierno de Pedro Sánchez", aventuró, criticando que el Gobierno nacional "crea" inquietudes entre comunidades autónomas. Luengo ha expresado que el Gobierno regional "apoya a los regantes".