Los chiringuitos de playa ya pueden renovar la licencia para 2023, a expensas de que Costas decida el cierre de cinco de ellos

CARTAGENA. El Ayuntamiento de Cartagena ha abierto el plazo de presentación de instancias para la renovación de las instalaciones temporales de las playas del término municipal de Cartagena. Se trata de un trámite legal para confirmar que los licitadores de los chiringuitos del municipio que consiguieron la adjudicación de los diferentes lotes durante las temporadas 2021, 2022, 2023 y 2024 continúan interesados en ocupar y explotar las instalaciones. Antes del 31 de enero de cada año el adjudicatario deberá solicitar al Ayuntamiento de Cartagena la renovación de la instalación. En el caso de no hacerlo se entenderá que renuncia a su renovación. En tal caso, esa instalación será objeto de nueva licitación.

No obstante, algunos de estos establecimientos podrían quedarse con la solicitud hecha pero sin posibilidad de abrir a partir del próximo marzo y tampoco el año siguiente, ya que están esperando a ver qué es lo que decide Costas, que a mediados del pasado verano abría un expediente al Ayuntamiento de Cartagena apercibiendo de cierre de cinco chiringuitos por incumplir el pliego de condiciones. El escrito indicaba, entre otros aspectos, que las instalaciones no estaban abiertas al público en horario de mañana, en el que hay una mayor afluencia de usuarios en las playas de la Región de Murcia, "abriendo únicamente en horario de tarde y noche" argumentando, por tanto, que "no están prestando un servicio a los usuarios de la playa sino que atraen personas que se desplazan a la playa con la única finalidad de consumir los servicios de hostelería que aquéllas prestan".

"Se ha detectado", informaba el pasado verano en un informe remitido al Ayuntamiento "que la afluencia de usuarios de la playa es tan reducida que determinados empresarios -el caso de los denunciados -que explotan las instalaciones de temporada han dejado de abrir sus establecimientos en el horario habitual para dichos usuarios, habiendo sustituido esa clientela por otra en nada relacionada con la utilización y disfrute de la playa ni con los elementos asociados a la autorización (sombrillas, hamacas, etc…), que ni siquiera se llegan a instalar en su totalidad". "Nos encontramos", indicaba, por otro lado el expediente "con una realidad en la que clientela de esas instalaciones es ajena al uso de la playa, puesto que acuden al lugar expresamente a consumir servicios que en modo alguno son accesorios del disfrute de la playa, finalidad evidente de los servicios de temporada. Dichas instalaciones de temporada han devenido en establecimientos de hostelería que pueden tener ubicación en cualquier parte ya que su clientela es ajena al uso de la playa; la innecesaridad de estar ubicadas en DPMT socava la base jurídica de la autorización otorgada".

El Ayuntamiento decidió recurrir esta decisión de la administración dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, pero en estos momentos nada se conoce de la resolución definitiva, " hemos dado traslado a todos los chiringuitos de que nos informen de su interés en renovación de la autorización, sin perjuicio de una posterior resolución de la demarcación de costas", explicaba a Murcia Plaza la edil de Litoral, Cristina Pérez.