CARTAGENA. Recolonizar y recuperar el hábitat perdido en algunas zonas de la costa del Mar Menor es el reto del proyecto europeo Life Transfer -en la que participa la Consejería de Agua- que en estos momentos está siendo sometido a información pública bajo el nombre 'Proyecto Ejecutivo para extracción y trasplante de angiospermas acuáticas sumergidas en la laguna del Mar Menor'.
El proyecto, que supondrá una inversión de 133.000 euros, consiste en recolonizar determinadas zona de la especie autóctona Cymodocea nodosa, que ayudará a recuperar el hábitat perdido, mediante su trasplante manual a partir de semillas de otros lugares donantes donde todavía tiene presencia. La Cymodea nodosa ha estado presente en el Mar Menor desde que existen registros de su colonización hace 100 años, y ha habitado tanto las áreas fangosas profundas de la laguna, como los fondos arenosos poco profundos. Estas especies tienen una rápida capacidad de recuperación de los impactos antrópicos, como se demostró tras las acciones de relleno de playas realizadas en la década de 1980 que enterraron algunas de ellas, recuperando sus densidades anteriores entre 10 y 15 años después.
Debido a cambios en sus condiciones hidrodinámicas por presiones antrópicas, esto provocó la invasión y rápida expansión del alga natural (80% del fondo de la laguna), acumulando materia orgánica y limo, en detrimento de las praderas de Cymodocea nodosa y Ruppia cirrhosa y su fauna (incluidas más de 30 especies de peces como los caballitos de mar).
El dragado y colocación de rompeolas en las playas alteraron estas condiciones favoreciendo la formación de bancos de arena, la acumulación de detritos y turbidez de las aguas, reduciendo hábitats arenosos y pastos marinos prados. Es por ello que se considera de gran importancia restaurar las condiciones hidrodinámicas de la laguna y la calidad del sustrato en el Mar Menor para recuperar praderas de Cymodocea nodosa y Ruppia cirrhosa mediante acciones de restauración.
Las operaciones de remoción y trasplante de rizomas se harán principalmente desde Los Urrutias hasta el sur de Los Nietos, donde se ha constatado que existen problemas que afectan a las praderas, tales como formación de secos, enfangamiento, pérdida de transmisión de luz, efectos de espigones de puertos y diques, o entradas de agua dulce y nutrientes.
Las acciones a desarrollar consistirán en la recogida y trasplante de rizomas de fanerógamas acuáticas en un área acotada y su replantación en otras áreas, con una doble finalidad: evitar el deterioro de praderas amenazadas por la colmatación o los cambios hidrodinámicos originados por actuaciones costeras, replantándolas en zonas no impactadas, y, en otros casos, para la replantación y recuperación de praderas tras la restauración de las zonas deterioradas, una vez eliminados los problemas que las afectaban
Las praderas marinas formadas por fanerógamas son reconocidas como prioritarias para la conservación de las lagunas costeras, y representan uno de los más llamativos ejemplos de organismos que ayudan a recuperar los ecosistemas marinos.
El objetivo de este proyecto es mejorar el estado de conservación de lagunas costeras en ocho lugares pertenecientes a la red Natura 2000 de Italia, Grecia y España.
El proyecto Life Transfer está cofinanciado por el Programa Life+ de la Unión Europea, instrumento de financiación de la UE para el medio ambiente y acción por el clima.
Además de la Comunidad Autónoma, a través de la Dirección General del Mar Menor y de la Dirección General de la Unión Europea, participan en este proyecto el Centro Tecnológico de la Energía y del Medio Ambiente de la Región de Murcia, la Universidad de Murcia, la Università degli Studi di Ferrara (coordinadora de la iniciativa), Amvrakikos gulf – Lefkada Management Agency, la University Ca’ Foscari Venice, el Ente di Gestione per i Parchi e la Biodiversità-Delta del Po, el Hellenic Centre for Marine Research, el Istituto Delta Ecologia Applicata srl, y el Ente Parco Delta del Po Veneto.