Foto: Escuela de Vela Socaire.CARTAGENA. Poco a poco, la cercanía del verano va reactivando sectores que, con la pandemia, sus restricciones y el mal tiempo permanecían en pausa. Los deportes náuticos que forman parte del paisaje característico del Mar Menor van recogiendo reservas de cara a un periodo estival que se espera muy bueno. Estas expectativas se expresan con mucha prudencia ya que, tras dos años de sorpresa en sorpresa, nadie puede asegurar que cualquier imprevisto de al traste con las expectativas.
"Las reservas van entrando poco a poco. El problema es que todavía hay colegios que no tienen previstas salidas a actividades de deportes náuticos y eso nos lastra un poco", señalan desde la escuela de vela Sandrina, en La Manga del Mar Menor. "Las previsiones son muy buenas. Aunque llegamos tarde para los grupos, ya que estas reservas se realizan con mucha más antelación", añaden desde la escuela de vela Socaire, en Santiago de la Ribera. El retraso de la llegada del buen tiempo, tras un mes de marzo pasado por agua y sin un sol continuo pese a que la Semana Santa tuvo un buen clima durante el puente.
Han sido dos años de problemas, altibajos y dificultades para este tipo de negocios que tiene su razón de ser en grupos de gente más o menos numerosos y en la plena movilidad ente municipios. El 2021, con la vacunación aun sin llegar a un porcentaje alto de la población impidió que la temporada de primavera funcionara con normalidad.
Pese a las buenas previsiones, el estado del Mar Menor vuelve a poner en duda como llegará la laguna salada al verano y por ello, si los sectores que necesitan de un Mar Menor 'en forma' podrán trabajar con normalidad. "Ahora mismo no nos afecta. Pero todo dependerá también de la publicidad. Si es muy mala, la gente no vendrá. No digo que se engañe a la gente, pero que tampoco se cree una alarma mayor de la realidad", afirma desde la escuela Sandrina. "El estado del Mar Menor nos puede lastrar. Ahora mismo si es verdad que hay algunas zonas que están sufriendo y esperemos que en las próximas semanas se limpien las zonas que impidan un deterioro", afirman por su parte desde la escuela Socaire. "El agua, una vez quitas las algas, está limpia. Todos sabemos que el principal problema es el campo", añaden desde la escuela de La Manga.
