La nueva vida del Playa Park de La Manga: proyectan un complejo deportivo de referencia en el Mar Menor 

MURCIA. El Playa Park de La Manga -un conocido espacio de ocio infantil a orillas del Mar Menor que llevaba tiempo sin funcionar como tal y que estaba sumido en un aparente abandono- tendrá una nueva vida, ya que en esta ubicación privilegiada (al principio de La Manga, km, 1) se ha proyectado un gran complejo deportivo, con especial protagonismo de los deportes náuticos, que revitalizará la zona y contribuirá a desestacionalizar el turismo, siendo un atractivo añadido para atraer visitantes durante todo el año.

Se trata de un proyecto muy ambicioso, que apenas ha dado sus primeros pasos, de Hotelania, grupo hotelero con más de 20 años de experiencia profesional que cuenta con dos hoteles de referencia en La Manga como son Delfines Hotel & Suites y Gaviotas Hotel & Event Center.

Según han confirmado desde Hotelania a Murcia Plaza, ya se habrían adquirido los terrenos, una parcela de cerca de quince mil metros cuadrados en un entorno único y muy cercana a los dos hoteles del grupo, que ofrece numerosas posibilidades para acoger instalaciones deportivas y en especial para desarrollar diferentes actividades relacionadas con el mar (piragüismos, vela,...) -llevados a cabo de una forma sostenible y respetuosa con la laguna-, así como para ofrecer diferentes servicios complementarios.

Aunque el proyecto se encuentra en una fase incipiente, la idea es transformar el antiguo Playa Park en un complejo integrador con la cultura del deporte como bandera, concebido para diferenciarse de las instalaciones ya existentes. Se trata, además, de una iniciativa que servirá para aprovechar las muchas posibilidades de la zona durante todo el año, no solo en los meses de verano, que es una de las asignaturas pendientes de La Manga.

Asimismo, el proyecto del Grupo Hotelania rescatará del desuso esta gran infraestructura que muchos 'mangueros' recordarán por haber sido un espacio de ocio para los más pequeños durante años, que daba su bienvenida con un gran pitufo azul. Hoy en día, se conserva el pórtico de entrada que conduce por una pequeña carretera hasta las instalaciones.