MURCIA. Estudiantes, amas de casa, jubilados, parados o trabajadores que sacan un hueco para cuidarse. Es difícil establecer el perfil medio de los usuarios de los gimnasios. Y es que la fiebre por cuidarse ha llegado a la Región y como consecuencia directa de ello se han disparado las aperturas tras ver los empresarios un nicho de negocio.
Abrir un gimnasio o un centro deportivo es relativamente barato. Al menos los que más proliferan, los más pequeños, con "una veintena de máquinas y alquileres baratos". Así lo explica Antonio Contreras, distribuidor de material deportivo, quien asegura que las ventas han crecido un 30% tras la pandemia. La amplia demanda hace que "haya una oferta cada vez más amplia capaz de satisfacer todos los gustos" y de cubrir las necesidades de todas las edades. Y ya no se mira la zona: hay aperturas de gimnasios en polígonos industriales, centros comerciales o de ocio, como el Zig Zag de Murcia, o pequeños bajos en los barrios del centro o las afueras de las ciudades.
Las petición de licencias de apertura se ha duplicado en un año en los municipios más poblados, como Murcia, Cartagena o Lorca. Y las cadenas europeas ya han visto un nicho importante en la Región, donde algunas como Fitness Park se ha fijado en el centro comercial Dos Mares Shopping de San Javier para su segundo local en la Región.
Pero no es la única, Basic Fit, otra importante cadena, ya ha abierto uno de sus locales en Cartagena. Y los particulares también se han lanzado. Adelgazar, ganar flexibilidad, tonificar el cuerpo o sentirse bien, son los motivos por los que cada vez más gente decide acudir al gimnasio, "sin olvidar otros factores como las relaciones sociales que se fomentan, especialmente, con las actividades que se practican en grupo, dirigidas por monitores especializados".
Otra forma de cuidarse y socializar es hacer deporte en la calle. Y reunirse en parques o gimnasios al aire libre para practicarlo, lo que se conoce como calistenia, es algo cada vez más demandado. Sólo hay que darse una vuelta por zona con aparatos ya instalados para ver la gran concentración de personas, sobre todo jóvenes, que hay. La oferta tanto público como privada se ha duplicado en un año en la Región con el desarrollo de proyectos privados o municipales.
Murcia contará con nuevas instalaciones en los jardines Trío de las Vegas, de Vistalegre; la Avenida de la Patrulla Águila, en Santiago y Zaraiche; el carril de Las Palmeras, en San Basilio y el Lago o Cantante Mari Trini; el Infante Don Juan Manuel, así como en la plaza de la Democracia de El Palmar, cuyo proyecto ya está aprobado y las obras contarán con un presupuesto total de 243.347 euros.
Pero no sólo se han incrementado los proyectos municipales. Varios gimnasios privados al aire libre se han abierto en Murcia en los últimos meses, como 180 Training Park, un espacio de entrenamiento al aire libre, situado en el cruce de Juan de Borbón con Príncipe de Asturias.
El Ayuntamiento está redactando además cinco nuevos proyectos de zonas de calistenia, que se instalarán en la calle Miguel Ángel Blanco de Santiago el Mayor; el meandro del río de Rincón de Beniscornia; el jardín del Verdolay de La Alberca; en la plaza Pedáneo Lucas Jiménez de Sangonera la Seca; y en Espinardo.
La inversión en estas instalaciones, que ha sido de las más demandadas entre los vecinos de Murcia en los presupuestos participativos, se ha duplicado en un año. Pero no sólo en la capital han despegado estas instalaciones. Si este verano se daba un paseo por la playa de Las Palmeras de Los Narejos, en Los Alcázares, era fácil ver a grupos de jóvenes haciendo deporte en la zona con aparatos de gimnasia instalada hace unos meses.
En Cartagena también se apuesta por la calistenia. Y el Consistorio anunciaba recientemente que el Parque Torres contará con una nueva zona para facilitar la práctica de deportes al aire libre en este área tan emblemática de la ciudad. La instalación de los elementos deportivos se ha adjudicado a Juegos Kompan por un importe total de 18.029 euros.
